Hace poco descubrí esta foto del cantante y guitarrista de The Clash, Joe Strummer , vestido de corredor y con un dorsal. No es que tuviera mucha pinta de corredor el muchacho, pero buscando en internet descubrí que parece que al menos corrió 3 maratones y alguno por debajo de las 4 horas (se dice que 3h20 el mejor) siendo ya una estrella del punk-rock mundial. Como se puede apreciar en la foto, es la antítesis del típico flipatleta del que se habla en este divertidísimo post .
Descubrí además que no sólo era el anti-flipatleta en su atuendo, si no también en su manera de entrenar y en sus costumbres del día previo a correr un maratón.
En una entrevista que le hicieron en 1999 para la revista norteamericana Steppin, cuando le preguntaron por su afición a correr maratones y su manera de prepararlos, dijo lo siguiente:
Realmente no se me debe preguntar acerca de mi formación, régimen, ya sabes … .Okay, usted lo quiere, aquí está: Beba 10 pintas de cerveza la noche antes de la carrera. Ya tiene eso? Y no ejecutar un solo paso al menos cuatro semanas antes de la carrera … Pero asegúrese de poner una advertencia en este artículo, «No intente hacer esto en casa. ‘ Quiero decir, a mí me funciona y Hunter Thompson, pero podría no funcionar para otros. Yo sólo puedo decir lo que hago.
En abril de 1982, el mánager del grupo viendo que no estaban generando suficiente expectación con el lanzamiento de un nuevo disco y los conciertos programados, le dijo a Joe Strummer que desapareciera, como estrategia de márketing. Le dijo que se fuese a Texas, pero el no dijo nada y se fue con su novia a París, donde cuentan ellos mismos que corrieron el maratón. No hay registros oficiales ni fotos con dorsal, pero si las hay del maratón de Londres de 1983. Tampoco hay foto con dorsal del maratón de 1981, pero parece ser que decidía correrlo pocos días antes y que se iba a correrlo sin más, sin necesidad de estar inscrito.
Sea totalmente cierto o parte de leyenda urbana, es una historia curiosa que rompe con todos los esquemas de preparación de un maratón y de los estereotipos de una estrella del punk. Poco después del maratón de París expulsaron al batería, Topper Headon, por su fuerte adicción a la heroína.
También se da la circunstancia de que Joe Strummer era un enamorado de Granada, ciudad que visitó en varias ocasiones pasando largas temporadas en ella. Debido a esto, en 2011 surgió una iniciativa en Facebook pidiendo poner su nombre a una calle o plaza de Granada, iniciativa que caló. Finalmente en mayo de 2013 el ayto. decidió poner su nombre a una pequeña placeta del barrio del Realejo, situada por la Cuesta de Escoriaza, con unas «inmejorables vistas y vigilada por los grafitis de El Niño de Las Pinturas «, tal como cuenta este artículo de El País.
Le gustaba correr, beber cerveza antes y después de correr y era un enamorado de Granada. Este hombre hubiera sido un Cualquiera en toda regla;)
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