Cuando comencé a interesarme por la dieta paleo no tenía en mente utilizarla para mejorar mi rendimiento deportivo. Mi interés estaba centrado en mi salud, en ese momento estaba tratando de recuperarla. Por eso fui la primera sorprendida al notar que comer así me aportaba ventajas en tanto que corredora. Los corredores minimalistas sabemos que a veces desafiar la lógica más elemental, como la que nos dice que la amortiguación reduce el impacto, puede ser una buena idea. ¿Te atreves a hacer lo mismo con la nutrición?
Hoy quiero exponer no uno sino diez motivos por los que, si eres corredor, deberías probar la nutrición evolutiva. Si te aventuras a seguir leyendo sabrás por qué pienso que si corremos como humanos resulta coherente comer también como humanos y que si queremos sentirnos con más energía no vale lo de comer cualquier cosa porque no es verdad eso de que lo quemaremos corriendo. Además averiguarás cómo evitar la inflamación sistémica, dejarás de estar pendiente de tus niveles de hierro, tus michelines menguaran y en las carreras no tendrás que comer cada pocos kilómetros porque tu cuerpo aprenderá a quemar grasas. Además recuperarás la maravillosa sensación de comer con hambre. ¿Quieres más? ¿Sabes que ésta es la dieta que siguen algunos grandes corredores como Tim Olson? Si quieres saber más detalles sigue leyendo.
1. Porque si corres como un humano deberías comer también como un humano
Cada vez requiere menos esfuerzo explicar por qué correr descalzo-minimalista es algo natural e intrínsecamente humano. No en vano la primera prueba obvia la tenemos observando nuestro cuerpo. Nacemos descalzos, los pies no tienen tacón ni controles de pisada y en los lugares en los que no se calza a los niños desde muy pequeños éstos corren sin problemas y con una técnica envidiable. De hecho todos los niños corren así de un modo natural hasta que los adultos modificamos eso con el calzado. Evolucionamos hasta convertirnos en lo que somos (homo sapiens sapiens) sin calzado o usando una protección mínima en los momentos en que era necesaria. Y del mismo modo evolucionamos y nos convertimos en lo que somos comiendo ciertos alimentos y no otros. Así, comenzar a comer proteínas y grasas animales fue clave para simplificar nuestro sistema digestivo, lo que a su vez permitió el desarrollo de nuestro cerebro.
Hay ciertos alimentos que pueden considerarse genuinamente humanos en el sentido en que nos acompañan desde el inicio de la evolución del género homo. Hemos evolucionado consumiendo dichos alimentos y nuestro genoma está plenamente adaptado a ellos. Esos alimentos son las carnes, pescados, huevos, frutas y ciertos vegetales y raíces. A lo largo de millones de años de evolución, la dieta de nuestros antepasados estuvo formada por diferentes combinaciones de dichos nutrientes en los que la presencia de proteínas y grasas animales y la poca disponibilidad de alimentos ricos en azúcares resultaron fundamentales para convertirnos en lo que somos desde el punto de vista metabólico.
Hay evidencias de que hace unos 100.000 años algunos grupos de humanos ya habían sido capaces de dominar el fuego. Eso facilitó todavía más las cosas y permitió que fuera más fácil consumir y digerir ciertos alimentos. Las proteínas de los músculos de los animales se hicieron más asimilables y probablemente también pudimos comenzar a consumir ciertos vegetales que al cocinarse podíamos digerir, y no estoy hablando de cereales sino, por ejemplo, de algunos tubérculos. La tecnología necesaria para el consumo de cereales es tan compleja que no pudo aparecer hasta hace unos 10.000 años con la revolución que supuso el neolítico. Y eso desde el punto de vista evolutivo es muy poco tiempo. Para más inri, resulta que los cereales son probablemente uno de los alimentos que más se ha modificado en los últimos años. No hablo ya de miles ni de cientos, me refiero a unas pocas decenas de años. El trigo, el cereal más consumido en el mundo, es el ejemplo perfecto de constantes modificaciones profundas que lo hacen, sin duda, más rentable a la vez que más susceptible de provocar alergias, intolerancias y otros problemas de salud más inespecíficos.
En conclusión, considero que si queremos comer lo más parecido posible a cómo lo hacían nuestros ancestros corredores descalzos cuando salían de caza o recolección haríamos bien en evitar alimentos procesados, azúcares y también cereales y legumbres. Se trata, en definitiva, de comer como humanos.
2. Porque hacer deporte no te da carta blanca con la comida basura
Entre algunos corredores está extendida la creencia que dice que si haces deporte puedes comer tanta basura como quieras porque corriendo la quemarás. Es un error pensar así. Comer comida basura consistente en cereales azucarados, bollería y todo tipo de productos procesados formados básicamente por harinas refinadas, azúcar y grasas poco saludables nunca es una buena idea por mucho ejercicio que hagamos. En primer lugar esos son alimentos vacíos desde el punto de vista nutricional y ocupan el espacio de otros alimentos más saludables dándonos a cambio calorías de rápida asimilación que se acabarán convirtiendo en grasa.
Si la comida procesada, el pan y la bollería forman una parte importante de nuestra alimentación estaremos ganando puntos para que cuando cumplamos algunos años la diabetes tipo 2, la dislipemia (patologías relacionadas con los niveles de triglicéridos y colesterol) y demás trastornos asociados al síndrome metabólico hagan su aparición. Hacer deporte no nos librará de ello pero si combinamos el ejercicio con un estilo de vida saludable que incluya una dieta más acorde con nuestra evolución y nuestra genética las probabilidades de llegar de una edad avanzada sin sufrir esos problemas aumentarán considerablemente.
3. Porque tendrás más energía para moverte
Los primeros días después de comenzar una dieta paleolítica están marcados por el deseo de comer pan y otros alimentos a los que estamos acostumbrados y que además nos producen un subidón de glucosa que echamos de menos. Sin embargo, pasados esos primeros días es habitual notar una mejoría en nuestro vigor físico y sentir que tenemos más energía disponible para poder hacer cosas como correr o trabajar. Esto sucede básicamente como consecuencia de la eliminación de los cereales de la dieta. No nos damos cuenta de la cantidad de cereales que comemos hasta que no los eliminamos, porque dejar de comer cereales supone no comer galletas, bollos, pan, cereales de desayuno, palitos de cangrejo, pizza, pasta, tortas de arroz y muchos otros alimentos procesados. Comer todos esos alimentos ocupaba un espacio en nuestros platos y en nuestros estómagos que ahora ocupan otros alimentos: verduras, frutas, carnes, huevos y pescado. Aunque mucha gente piensa que con este tipo de dieta se consume mucha carne, el cambio más importante, al menos en mi caso, ha sido que la cantidad de verdura y fruta se ha triplicado. Ése es el secreto del aumento de energía: la sustitución de una serie de alimentos que nos proporcionaban básicamente calorías vacías (cereales) por otros alimentos que además de calorías nos proporcionan nutrientes fundamentales: proteínas, grasas, vitaminas y antioxidantes.
La pregunta que me suelen formular después de decir esto es: ¿Y no nos quedaremos cortos de hidratos de carbono? Podríamos hablar mucho de los hidratos de carbono y decir, por ejemplo, que no son un nutriente esencial. Pero eso lo dejaremos para otro día. De momento diré que con la dieta paleolítica sí que se consumen hidratos de carbono: los contenidos en frutas y verduras.

4. Porque ésta es una dieta antiinflamatoria
La inflamación es una respuesta natural del cuerpo ante una lesión o herida. Se trata de una fase del proceso de curación. Sin embargo, hay otro tipo de inflamación de tipo crónico que afecta a todo el cuerpo. Hablamos de la inflamación sistémica, una de cuyas causas principales es el estilo de vida moderno y en concreto la alimentación actual. La inflamación sistémica hace que nuestro sistema inmune esté continuamente en alerta lo que provoca una situación de estrés crónico que puede acabar desembocando en diferentes enfermedades, algunas de ellas muy graves.
Los síntomas de la inflamación generalizada suelen ser difusos y difíciles de reconocer. Pueden incluir retención de líquidos, dolores articulares, estrés, congestión nasal, etc. Y probablemente no seamos conscientes de padecerla hasta que no nos libramos de ella. Si probamos la dieta evolutiva durante sólo un mes (aunque debe ser un cambio real y estricto) comprobaremos cómo nuestro cuerpo literalmente se desinfla, el volumen del abdomen baja y no sólo, aunque también, por la disminución de la grasa abdominal. Además los dolores articulares se aliviarán. La sensación de desinflarme fue una de las primeras cosas que noté cuando comencé a comer paleo.
5. Porque comiendo paleo te olvidarás de los suplementos de hierro
A lo largo de mi vida he padecido siempre de anemia por falta de hierro. Había una causa que parecía explicarlo: celiaquía no diagnosticada. Sin embargo después del diagnóstico y la consiguiente dieta sin gluten, aunque mejoraron algunos de mis marcadores de salud, mi cuerpo continuó escaso de hierro. La situación dejó de ser tan grave pero tuve que seguir controlando los niveles de hierro periódicamente y tomar suplementos de vez en cuando. Me convencí de que tener déficit de hierro era “normal”. Muchas personas a mi alrededor tenían el mismo problema, aun sin celiaquía de por medio. El hecho de ser mujer y hacer deporte parecía ser un factor que me condenaba a unos niveles de hierro siempre bajos.
Los suplementos de hierro son usados habitualmente por muchos deportistas, sobre todo mujeres aunque también algunos hombres. En su momento leí que los microtraumatismos que se producen en cada impacto hacen que las necesidades de hierro de los corredores sean mayores. Las mujeres además tenemos unas necesidades aumentadas a causa de la menstruación. Lo cierto es que asumí que la falta de hierro era algo normal que había que compensar con suplementos.
Cuando comencé a leer sobre dieta evolutiva me sorprendió la advertencia que hace Robb Wolf en relación al hierro. Wolf insiste en el peligro de los suplementos de hierro puesto que un exceso de este mineral resulta muy tóxico para el organismo. Bien, pensé, eso no es aplicable en mi caso. Comencé con esta dieta en julio del año 2012. En el último análisis sanguíneo antes del cambio de dieta mis niveles de hierro estaban justo en el límite bajo. Seis meses después de cambiar la dieta, tiempo en el que no tomé ningún suplemento, me hice otro análisis de sangre en el que algunas cosas cambiaron, entre ellas los niveles de hierro que por primera vez en mi historia personal estaban cerca del límite alto. Nunca había tenido unos resultados así, ni tan siquiera con suplementos.
El motivo de este cambio hay que buscarlo en el hecho de que al dejar de tomar legumbres y cereales eliminamos de la dieta algunas sustancias contenidas en éstas que dificultan la absorción de hierro. En concreto los cereales integrales y legumbres son ricos en ácido fítico, que es una sustancia que tiene un efecto quelante, lo que implica que los minerales, entre ellos el hierro, no se absorben bien. El correcto remojado y cocinado de las legumbres reduce los niveles de este compuesto, pero no los elimina.
Probablemente el motivo que ha hecho que, en mi caso, la absorción de hierro haya mejorado de manera espectacular es multifactorial. Además de que evito el ácido fítico, comer paleolítico ha restablecido en gran parte mi función digestiva y seguro que eso ha tenido que ver. Jamás pensé cuando comencé a comer así que los cambios serían tan espectaculares. Ni siquiera hice demasiado caso en su momento a Robb Wolf en sus advertencias contra los suplementos de hierro y por eso en mi cajón de los medicamentos tengo una caja que creí que necesitaría, pero me equivoqué.
Mi consejo es que ante unos niveles bajos de hierro probemos un cambio de dieta. No basta con aumentar la cantidad de hierro hemo ingerido (hierro procedente de animales) si luego consumimos alimentos que van a dificultar su absorción.
6. Porque con esta dieta dirás adiós a los michelines
Si somos corredores y conocemos a otros corredores sabremos que correr nos hace sentir mejor física y mentalmente, pero también sabremos que eso no supone una garantía de que nos desharemos de los michelines. De hecho, todos conocemos a corredores que entrenan duro a diario pero que no consiguen librarse de esa desagradable capa de grasa abdominal. Hacer una dieta con pocas calorías no funciona porque cuando hay restricción calórica nuestro cuerpo reacciona volviéndose más eficiente en la acumulación de grasas; éste es el mecanismo que evolutivamente ha utilizado nuestro cuerpo para superar las épocas de hambruna. La clave pues no está en hacer ejercicio y limitar las calorías pues esto nos hará más eficientes en el almacenaje de las mismas en forma de grasas. Lo que deberíamos hacer es dejar de centrarnos en las calorías ingeridas y poner nuestro foco de atención en el tipo de alimentos que elegimos. Lo primero es que seamos conscientes de que lo que se convierte en grasa es el exceso de glucosa en la sangre.
¿Conoces el ciclo de la glucosa dentro del cuerpo? Esto es lo que sucede cuando consumimos glucosa:
- A los humanos nos encantan los alimentos dulces y todos aquellos que entran como glucosa en la sangre (cereales). Estos alimentos (azúcar, pasteles, bollos, pan, pasta…) nos resultan naturalmente apetecibles ya que esta apetencia hacia lo dulce suponía algo deseable desde el punto de vista evolutivo. Los alimentos ricos en azúcares son raros en la naturaleza y si los conseguíamos de manera ocasional era importante consumir tantos como pudiéramos para poder acumular grasas para utilizar en períodos de hambruna.
- Cuando comemos alimentos ricos en azúcares el nivel de glucosa en sangre se eleva, lo que hace que nos sintamos eufóricos, entre otros motivos porque también aumentan los niveles de dopamina en el cerebro. El aumento de la glucosa en sangre nos da un chute de energía que resulta agradable y vigorizante, pero de manera inmediata nuestro páncreas reacciona lanzando insulina al torrente sanguíneo.
- La insulina sirve para permitir que la glucosa abandone el torrente sanguíneo y pase al interior de los tejidos donde puede ser usada por las células o bien almacenada en forma de glucógeno para cuando los músculos la necesiten. Los niveles altos de glucosa en sangre son tóxicos, por tanto la insulina se ocupa de que la cantidad de glucosa se reduzca rápidamente. Por ello toda la glucosa que no se usa de modo inmediato o no es almacenada en los depósitos de glucógeno se transforma para almacenarse en forma de grasa. En realidad casi toda la glucosa acaba convirtiéndose en grasa, puesto que en nuestra dieta actual es tan elevado el consumo de carbohidratos que nuestros depósitos de glucógeno suelen estar llenos (excepto justo después del ejercicio intenso).
- Una vez que la insulina ha hecho su trabajo bajando los niveles de glucosa en sangre volveremos a desear consumir alimentos ricos en azúcares porque la sensación de tener la glucosa alta en sangre y elevados niveles de dopamina en el cerebro engancha y resulta placentera. En cambio, el trabajo realizado por la insulina bajando los niveles de glucosa provoca una sensación de desagradable debilidad. Eso es lo que sucede cuando tenemos un bajón de azúcar a mitad de mañana y necesitamos comer unas galletas para aguantar hasta la comida.
Este ciclo es el que hace que por mucho ejercicio que hagamos sigamos teniendo michelines que nos causarán más problemas que los puramente estéticos. La acumulación de grasa (especialmente abdominal) es un factor de riesgo cardiovascular importante y además repetir el ciclo glucosa-insulina varias veces cada día durante años hará que aumente la resistencia de nuestros tejidos a la insulina, de modo que cada vez hará falta más insulina para hacer el mismo trabajo y eso acabará por agotar al páncreas. Éste es el mecanismo subyacente detrás de la mayoría de casos de diabetes tipo 2.
7. Porque aún no sabes qué es tener hambre
Nos recomiendan comer 5 veces al día. Lo cierto es que si la base de nuestra alimentación está formada por hidratos de carbono las necesitaremos. Las oscilaciones en los niveles glucosa/insulina hacen que el cerebro reclame más glucosa cuando todavía no se ha acabado de realizar la digestión. Muchos conocemos esa sensación, necesitamos picar algo cuando todavía notamos la barriga llena de la última comida. Si hacemos una dieta no basada en cereales nos libraremos de la necesidad de comer cada pocas horas y permitiremos al páncreas y al sistema digestivo descansar durante algunas horas cada día. Además recuperaremos la maravillosa sensación de comer con hambre de verdad.
8. Porque en las carreras largas tus tripas siempre te la juegan
Comer y beber mientras corremos es fundamental en carreras largas; necesitamos hidratarnos y reponer energía. Si no lo hacemos llegará un momento en que aparecerá un muro insalvable que nos obligará a abandonar. Lo habitual es consumir agua con sales y geles ricos en carbohidratos y con algunos aminoácidos. Al principio, con nuestros depósitos de glucógeno todavía llenos, podemos tirar sólo hidratándonos pero luego necesitaremos reponer carbohidratos a intervalos cada vez menores. Eso hace que también tengamos que incrementar considerablemente la ingesta de líquido, puesto que a la deshidratación inducida por la sudoración se suma la producida por las necesidades de nuestro sistema digestivo para poder asimilar los geles energéticos. Así pues, a medida que la carrera se alarga aumenta la necesidad de consumir geles y agua. Probablemente ésta sea una de las causas de los problemas digestivos y vómitos que a menudo sufren los participantes de las carreras de ultra running. Y esto sucede cuando nuestra fuente principal de energía procede primero del glucógeno almacenado en el hígado y los músculos y luego de las bolsitas llenas de gel pegajoso y dulce.
¿Existe otra opción? Sí, y pasa por reducir la dependencia de los carbohidratos y enseñar al cuerpo a usar otro tipo de combustible, la grasa. La oxidación de las grasas es un proceso que nos dará una energía de estilo diesel, perfecta para carreras de larga duración. Si hacemos una dieta de tipo evolutivo y practicamos el ayuno intermitente como parte de nuestro entreno estaremos enseñando al cuerpo a quemar grasas. Eso no significa que no vayas a necesitar quemar glucosa, pero no dependerás exclusivamente de ella para funcionar. Tenemos un motor híbrido que puede funcionar con glucosa y con ácidos grasos, ¿por qué limitarnos a sólo un tipo de energía, cuando además ésta (la glucosa disponible) es limitada y hay que reponerla tras muy poco tiempo de ejercicio? En nuestro cuerpo viaja un depósito de energía mucho mayor (grasas) que el de glucosa (glucógeno). Aprendamos a utilizarlo.
Aquí un ejemplo concreto y práctico de alimentación paleolítica en un ultra.
9. Porque enseñarás a tu cuerpo a quemar grasas
Durante años hemos leído que un atleta de resistencia ha de basar su alimentación en los carbohidratos porque son los que nos aportan la energía necesaria para poder correr, pedalear o nadar durante muchos kilómetros. Sin embargo parecemos olvidarnos de que el ser humano evolucionó como atleta de resistencia, cosa que parece que hacía bastante bien a pesar de que no tenía a su disposición barritas de cereales, geles con glucosa y maltodextrina, bebidas energéticas, pasta, arroz ni otros carbohidratos que consideramos indispensables para afrontar una carrera larga. ¿Qué consumían durante sus carreras nuestros ancestros cazadores recolectores? La respuesta es simple: grasa, la grasa almacenada en su cuerpo. Aunque estemos muy delgados nuestras reservas de grasa (a no ser que estemos desnutridos) nos servirán para mucho más tiempo de lo que nos podemos imaginar. Pero si siempre que hacemos ejercicio usamos glucosa como energía nuestro cuerpo no sabrá cómo usar de un modo adecuado la grasa almacenada.
Es importante enseñar al cuerpo a usar de un modo eficiente esas reservas haciendo una dieta de tipo paleo y practicando el ayuno intermitente (intermittent fasting). No se trata de eliminar la reposición de energía durante las carreras, pero sí de hacerlo de un modo más racional de modo que no dependamos exclusivamente de esa reposición porque en ese caso acabaremos encontrándonos con el famoso muro de la maratón o teniendo problemas digestivos en las ultras.
10. Porque probar la dieta que están haciendo gente como Tim Olson (o Pepe Roldán) puede estar bien
Seguro que sabes quién es Tim Olson, un ultrarunner estadounidense flamante ganador de la Western States 100 y cuarto clasificado en la Transvulcania 2013. Todo un ejemplo de lo lejos y lo rápido que puede llegar corriendo alguien que hace una dieta evolutiva. Podemos pensar, y probablemente con razón, que Tim Olson tiene una capacidad innata para las carreras de resistencia y que su rendimiento sería parecido con cualquier dieta siempre y cuando se garantizase el suministro de ciertos nutrientes básicos.
Nosotros no somos Tim Olson y comer paleo no hará que nos acerquemos a sus logros pero sí que puede hacer que nos acerquemos a las sensaciones de Pepe Roldán durante los 118 kilómetros de la CSP118. ¡Cómo!, ¿que todavía no has leído su crónica de ese ultratrail? Pues léela porque realmente vale la pena y sentirás mucha envidia de sus sensaciones corriendo esa prueba con zapatillas minimalistas y alimentación evolutiva. Toda una lección de lo que es correr y comer como humanos.
Interesantísimo,estaba pensando en hacerla y casi estoy convencido leyendo tus razones.Gracias.
Hola Dani, yo encantada de servir de ayuda. Si comienzas con la dieta evolutiva (o paleo) verás como tú mismo descubres más motivos, no todos están relacionados con el deporte pero sí con la salud y con algo tan subjetivo como sentirnos bien con nosotros mismos.
Es peligrosísima. Los hombres de las cavernas comían muy poca carne, pues era difícil encontrarla, comían frutas, frutos, hojas comestibles, etc… y la carne sólo cuando había, que era rara vez, y entonces hacían un festín. No tenían diabetes tipo II porque no llegaban a los 20 años y no les daba tiempo a que se les desarrollara.
El que debería haber ido entre paréntesis es Tim Olson. Porque Pepe Roldán es mucho más grande . Dónde va a parar… 🙂
Hola Pablo Arqued. Pues sí, realmente a mí me inspira más Pepe Roldán y me parece el ejemplo a seguir. Los corredores como Tim Olson no pueden ser un ejemplo real para nosotros, demasiado grande, demasiado lejos…
Además yo creo que Pepe, tímido y recatado él, habrá valorado que proteja su nombre entre paréntesis 😉
Muy bueno el post, muy bien explicado todo y super ameno, a mi me pasa como a Dani, estoy casi convencido, pero es que me gusta mucho comer 😉 y beber 😛
Pero por otro lado veo a Pepe, un tio coherente que te dice que esto es correcto y que lo vas a notar en todos los aspectos de tu vida
Habrá que probar, pero no se si ahora estoy preparado animicamente y mentalmente, de todas maneras si pudieras darme algunos link de información con pautas a seguir y quizas incluso menus te lo agradecería.
Gracias y un saludo
Hola ErLeon. Me hace ilusión verte por aquí. No nos conocemos, pero yo he leído y disfrutado varias de tus crónicas :).
Si te gusta mucho comer y beber te pareces a mí (y a mucha gente claro). Mucha gente piensa de mí que como poco porque no estoy todo el día picando galletas, caramelos, patatas… Pero cuando me ven comer cambian de opinión (y se arrepienten de haberme invitado a comer). Con esta dieta se puede comer mucho y muy bueno. Lo de la bebida ya es otro tema a mí me encanta beber agua, pero creo que cuando dices lo de que te gusta mucho beber no te referías a eso 😉
En próximos artículos seguiré dando lata, hablando de la cesta de la compra, de qué alimentos concretos son interesantes y también de menús. Pero de momento si quieres puedes pasarte por aquí: http://www.corrersingluten.blogspot.com.es/2013/02/paleodieta-para-principiantes.html En este enlace encontrarás información básica sobre este tipo de dieta. El artículo habla de paleodieta no pensada específicamente para deportistas, pero de momento puede servirte. En cuanto a recetas hay varios blogs en los que hacen platos alucinantes plenamente adaptados a esta dieta, sólo que a veces son recetas que requieren algo de elaboración. Eso no significa que comer paleo sea difícil, todo lo contrario, próximamente escribiré dando más detalles sobre cómo me las apaño yo.
Me ha gustado mucho el artículo Pesque. Realmente interesante. Yo padezco anemia casi siempre, por tanto me ha llamado mucha atención el efecto de esta dieta en personas como yo. No creo que me costara mucho trabajo seguir una dieta así pues las frutas y las verduras me encantan y las como mucho. La carne y el pescado lo como más como obligación, pero me gustan. Pero como dice Antonio me gusta comer otras muchas cosas! Y aunque no soy de bollería para nada, los cereales en el desayuno y el pan de vez en cuando….es que están muy buenos!!
Aún así, deseando que llegue el artículo de la cesta de la compra evolutiva y de paso saber sobre los lácteos, están fuera de esta dieta también??
Muchas gracias por compartir tu experiencia.
Hola Ñusi. Me alegra que te haya gustado.
Lo de la anemia (por falta de hierro) era para mí un misterio hasta ahora. Yo siempre la he padecido, aunque en mi caso había un motivo, la celiaquía y la posibilidad de que mi intestino no se hubiera recuperado bien. Pero es que la mayoría de mujeres que me rodean también tienen siempre anemia. Algunos hombres también tienen niveles bajos de hierro, pero no tanto como las mujeres. Como decía, para mí era un misterio porque no tiene sentido desde el punto de vista evolutivo que, de serie, la mitad de la población tenga problemas con la absorción de hierro. Por lo que he leído y experimentado hasta ahora, como digo en el post, parece que una de las causas es consumir alimentos para los que no estamos adecuadamente adaptados.
Como bien dices lo más complicado con esta dieta es el tema del desayuno y el pan. Tenemos tan arraigado el consumo de pan que no somos conscientes de las cantidades que acabamos tomando a lo largo del día. Si a eso añadimos las pizzas, la pasta, el arroz, los bollos y el almidón oculto en cantidad de alimentos procesados (incluso en la carne picada), la cantidad de cereales que tomamos a lo largo del día excede con mucho lo razonable.
El desayuno requiere una explicación aparte. Tenemos muy arraigado lo de comer cereales en el desayuno porque la industria alimentaria se ha encargado de convencernos de que se trata de la opción más sana y natural pero realmente lo de desayunar así es algo relativamente nuevo. Fue cosa de los hermanos Kellogg que a principios de siglo XX popularizaron los copos de cereales para el desayuno. Hasta ese momento la gente con posibilidades comía para desayunar huevos, carne, tocino… Los pobres comían lo que podían, que solían ser gachas de cereales. Los hermanos Kellogg eran miembros de la Iglesia de los Adventistas del Séptimo Día, confesión que defiende la alimentación vegetariana, y por ello consideraban que comer proteínas animales era algo que había que evitar. Kellogg’s se acabó convirtiendo en una gran compañía y convencieron a medio mundo de que desayunar sus cereales altamente procesados y azucarados es lo más natural y sano. Sin embargo se trata sólo de un hábito que podemos cambiar por otro. Al principio cuesta, pero todas las cosas que realmente merecen la pena cuestan un poco, aunque sólo al principio… 😉
Ese artículo, el de la cesta de la compra evolutiva, llegará. Es fundamental porque para cambiar la alimentación es por ahí por donde hay que empezar.
En cuanto a los lácteos, la respuesta no es simple. Yo de partida te diría que lo más sensato es eliminarlos durante un tiempo al menos (mínimo 1 mes). Pasado ese tiempo prueba pero con lácteos enteros, nada de desnatados. La leche cuanto menos procesada mejor (mejor pasteurizada que UHT) y los quesos mejor curados y de leche cruda. La leche causa problemas a mucha gente, aunque hay gente que parece tolerarla bien. Yo no la tomo, pero es un tema sobre el que se discute mucho dentro del «mundo paleo». Hay estudios que han asociado su consumo a algunas patologías como la esclerosis múltiple pero se tendrá que investigar más para sacar conclusiones. Yo lo que recomiendo es que te asegures de que realmente te sienta bien y para ello, como te he dicho antes, la única manera es dejar de consumirla durante un tiempo, luego introducirla y observarte. Si te sienta bien puedes mantenerla en tu dieta pero no creo que sea un alimento que sea imprescindible tomarlo a diario. A un adulto no le aporta nada especial que no pueda obtener con otros alimentos.
Súper interesante!!! Conocí la dieta a través de una conocida que compite en Fitness, ella es canadiense y la llama la dieta de las cavernas. Me llamo mucho la atención sobretodo por el cambio que dio ella y su cuerpo. A mi me encanta las frutas, verduras, carnes y pescados, pero reconozco que me costaría la vida eliminar las tostadas en mi desayuno y algún plato de pasta durante la semana…. Queremos saber más!
Hola Paqui.
Ese es otro de los nombres de esta dieta: dieta de las cavernas, evolutiva, paleodieta, primal… En realidad nos referimos a diferentes nombres para el mismo tipo de dieta.
Como con muchas otras cosas podemos leer mucho sobre el tema pero finalmente lo que nos convence es probar y notar que realmente nos sentimos mejor. En dietética muchas cosas no son lo que parecen y ahora se sabe que muchos de los dogmas mantenidos durante años, como el que dice que las grasas son malas, eran erróneos. Por eso al final lo que realmente nos llega y nos convence es comprobar en nosotros mismos o en personas cercanas qué pasa al modificar nuestra alimentación para acercarnos a un estilo paleo. Como ejemplo te diré que muchos familiares míos están comenzando a preguntarme y cambiar después de verme a mí. No te digo esto porque no haya ciencia y estudios científicos detrás, pero la experiencia personal y lo que aprendemos con ella también cuenta.
Lo del plato de pasta durante la semana… podría ser una excepción en una dieta de este tipo. Pero si hicieras esa excepción ya no podrías hacer más durante esa semana. De todos modos una vez que haces el esfuerzo de comenzar y mantener la dieta durante un tiempo (1 mes) se te quitan las ganas de excepciones. Seguiremos hablando del tema…
Yo también estoy muy interesado en saber más, recién empecé con el correr «bien» y de ahí salté a leer sobre la dieta paleo. En mi caso sufro de una enfermedad crónica de tipo auto-inmune y según he leído, esta dieta podría mitigar o frenar sus brotes. Lo malo es que soy súper panero, de cereales (integrales, eso sí :P) y de pasta. Si se empieza una dieta de este tipo, si luego puntualmente (una vez al mes por ejemplo) se rompe porque estás en una celebración o por mil motivos, pasa algo? O sea, si te acostumbras a dicha dieta, existe rebote por catar pan o una pizza un día?
Esperando estoy también el artículo sobre la cesta de la compra paleo!
Salud!
Joan, yo llevo poco tiempo pero te puedo decir que era muy panero, y que he estado 3 semanas seguidas sin probar prácticamente cereales, y un día que no pude me la salte y comí pizza, casi inmediatamente tuve una cantidad de gases impresionante, se notaba que era los cereales… siempre había tenido gases pero no tan fuertes, pero desde que empece la dieta menguaron muchísimo hasta ese día… es decir, te la saltaras porque no habrá más remedio pero tu mismo sacaras conclusiones…
Jaja, muchas gracias, asn, lo tendré en cuenta 😉 La verdad es que ante el feliz estreno que estoy teniendo con el minimalismo, y leyendo cosas tan lógicas como las que leo sobre esta forma de comer, no creo que tarde en dar el salto. El drama es que justo hace pocos días hicimos la compra grande en el mercadona e hice acopio de cereales, copos de avena, galletas de avena, pasta… vamos, que di en el clavo, jaja!
Hola Joan.
Creo que en tu caso es todavía más recomendable que pruebes esta dieta. No sé exactamente cual es la enfermedad que padeces pero sí que parece ser que hay ciertos rasgos comunes a muchas enfermedades de tipo autoinmune y este tipo de dieta puede ayudarte a estar mejor. Yo también padezco una enfermedad autoinmne, celiaquía, que teóricamente sólo tiene que ver con el gluten y en concreto la gliadina. Ésa es la teoría pero gracias a esta dieta mi salud ha mejorado mucho respecto a cuando sólo comía sin gluten.
No me extraña eso que dices de que eres muy panero. Antes del diagnóstico de celiaquía yo comía cantidades industriales de pan, cereales, pizza, seitán… y estaba convencida de que me sentaban bien. Suele pasar. Aquello que más daño hace es aquello a lo que parecemos estar enganchados como si de una droga dura se tratara. No noté realmente el daño que todo eso me hacía hasta que lo dejé completamente. Yo era una celíaca con todos los síntomas y con un intestino muy deteriorado, pero aún así no me daba cuenta. Hay una explicación para eso: parece ser que ciertos alimentos acaban afectando en el cerebro a nuestros receptores opioides, es decir, en el cerebro actúan como drogas. Quizá algunos problemas como la excesiva permeabilidad intestinal favorece este efecto en algunas personas. Por eso no sabrás realmente qué alimentos te sientan mal hasta que no dejes de consumirlos durante un tiempo.
Como bien dice asn, probablemente cuando lleves un tiempo con esta dieta y quieras saltártela un día esa excepción te haga sentir mal y no quieras repetir. No se trata de que exista rebote, simplemente es que una vez «deshabituado» notarás realmente cómo te sientan esos alimentos y lo más probable es que no te sienten bien.
Yo en tu caso concreto, dado que tienes una enfermedad crónica de tipo autoinmune, te recomendaría que si comienzas esta dieta pases un tiempo siendo lo más estricto posible y elimines completamente los lácteos, cereales, azúcares y legumbres y que cuando comiences a hacer excepciones éstas sean limitadas. Además hay algunos alimentos con los que deberías tener precaución: patatas, berenjenas, pimientos y tomates porque podrían causarte algún problema relacionado con la autoinmunidad, aunque nada que ver con los anteriores.
Dices que sobre todo tomas cereales integrales. Tomar los cereales así es bueno si sólo pensamos en el ciclo glucosa-insulina, pero eso no es todo. Uno de los motivos para no tomar cereales son los antinutrientes contenidos en éstos. En el post hablo del ácido fítico, pero también es importante tener en cuenta las lectinas contenidas en los cereales, sobre todo en la cáscara. Si quieres saber más sobre el tema puedes leer este artículo: http://www.corrersingluten.blogspot.com.es/2013/03/10-motivos-por-los-que-los-celiacos.html que escribí sobre la dieta paleo y la celiaquía. En el primer punto hablo de la celiaquía en tanto que enferemdad crónica autoinmune y de las lectinas.
Pueden resultarte de interés también estos artículos sobre autoinmunidad y dieta en la página web de Robb Wolf: http://robbwolf.com/category/autoimmunity/
Y si quieres más, en este caso sobre esclerósis múltiple y paleodieta puedes ver la charla de la doctora Terry Wahls en Ted: http://tedxtalks.ted.com/video/TEDxIowaCity-Dr-Terry-Wahls-Min No tiene desperdicio.
Finalmente, no puedo más que recomendarte que hagas la dieta porque creo que puede ayudarte. En el post no he hablado de trastornos relacionados con la autoinmunidad porque no era ese el tema, pero este es uno de los motivos principales por los que alguien puede aventurarse a probar este cambio de estilo de vida.
Caramba, Pesque, muchísimas gracias por la extensa y argumentadísima respuesta, me has aclarado varios conceptos y de hecho esta misma noche ya he cambiado el chip con la cena, fuera pan! Lo que creo que será más traumático para mí serán los desayunos, los cuales siempre han constado de pan tostado con aceite de oliva virgen, galletas de avena o galletas maría en su defecto más el zumo de naranja y café con leche, es decir, un desayuno de los que siempre había entendido como saludable, pero que entra en total contradicción con la dieta evolutiva. Voy a tener que indagar sobre éste y sobre otros aspectos, pero de momento, y gracias a tu artículo, me has hecho descubrir algo que, por lo menos, me ilusiona. Y si yo me pongo, me pongo, jeje, igual que me pasó con el minimalismo, de un día para otro me puse a caminar con calzado mínimo y a ir descalzo por casa.
Por cierto, lo que yo padezco es una forma de enfermedad reumática asociada a Espondilitis Anquilosante, aunque a mí (por suerte) se me ha manifestado en forma de brotes de Sacroileítis y Uveítis, los cuales son tremendamente incapacitantes cuando aparecen.
De nuevo, muchas gracias.
Salud
Hola Joan. Me alegra saber que la información que te he pasado te es útil. El tema de los desayunos es básicamente una cuestión de hábitos, una vez que los cambies desayunar paleo te parecerá lo más normal del mundo. Si reflexionamos un poco sobre lo que se considera un desayuno saludable, como el que has puesto de ejemplo, veremos que realmente es una comida bastante desequilibrada. El pan está formado por harina de cereal (mayoritariamente de trigo) y agua, suele tener otros ingredientes como azúcar pero no los tendremos en cuenta. Las galletas contienen también cereal, azúcar y en el mejor de los casos grasas vegetales no hidrogenadas. La leche contiene una cantidad importante de azúcares (lactosa) y habitualmente la tomamos desnatada o semi porque pensamos que es más saludable con lo que quitamos su componente más interesante, la grasa. El zumo de naranja es una fuente importante de azúcares de rápida asimilación, y también tiene vitaminas. Si recopilamos vemos que un desayuno de ese tipo está formado sobre todo por cereales que se convertirán en glucosa en la sangre, azúcares, unas pocas de proteínas (leche), algunas vitaminas y pocas grasas saludables (aceite de oliva virgen). El café no lo considero porque no aporta nutrientes aunque no le veo problema si no se abusa y se toma sin azúcar, de hecho parece que es rico en algunos antioxidantes. ¿Qué tiene de malo este desayuno? Pues que sobran carbohidratos y además la mayoría de ellos proceden de los cereales y faltan proteínas y grasas.
He leído alguna cosa sobre la espondilitis anquilosante. Sé que se ha planteado la hipótesis de que el consumo de almidón actúa como detonante de la enfermedad. Y también he leído de personas que han mejorado considerablemente sus síntomas haciendo dieta sin gluten. También parece haber una relación entre esta enfermedad y la Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII). Hace poco me pasaron la referencia de un estudio muy interesante en el que se relacionaba la EII con el consumo de gluten.Tendría que investigar más pero a priori considero que hacer una dieta de este tipo te puede reportar muchos beneficios. Eso sí, creo que en tu caso sería muy importante que hicieras una versión estricta de la dieta limitando al máximo las excepciones.
Hola Joan, hace una semana me detectaron la misma enfermedad, menos mal no está ligada al gen, si no mas bien parece que se manifestó por la alimentación, estoy leyendo sobre alimentación, y quería que me dieras algunos consejos
Muchas gracias
Hola Joan, permiso.
Sobre el desayuno, si te sirve, puedes tomar aguacates, uno grande todas las mañanas, frutos secos (si no eres alérgico) variados, sésamo,y además un par de piezas mas de manzana-plátano o meocoton. Te aseguro que con este bagaje vas mas que completo y sobrado. No has tomado un ápice de gluten y llevas grasas saludables é hidratos de carbono suficientes.
Un saludo y que te vaya bien.
Muy ameno el articulo!! creo que una de las grandes ventajas de la dieta paleo es la comunidad que hay detras, mas alla si es la mejor o no, la informacion y el apoyo que se encuentran son notables…y las experiencia vale sin duda!
He visto notables resultados en varias personas, en algunas comunidades es muy extendida…creo que una buena forma de cambiar habitos es precisamente hacerlos «en comunidad» . Para mi , cualquier dieta que elimine los alimentos procesados, ya tiene inmediatamente una buena repercusion en la salud y energia..
Hola Jano.
Tienes razón, es mucho más fácil hacer una dieta cuando te sientes respaldado por un grupo ya que la comida es algo eminentemente social y comer diferente a todo el mundo implica pagar un precio. Se gasta mucha energía, por ejemplo, explicando cada día por qué no quieres comerte una galleta. Yo tengo la «suerte» de poder decir que soy celíaca, pero ahora han empezado a ofrecerme galletas sin gluten (igual de poco saludables) y cuando digo que no quiero a veces la gente se molesta. Cuento esto porque al margen de que nos integremos en una comunidad de carvernícolas, es importante también tener las cosas lo suficientemente claras como para decidir qué queremos comer independientemente de la presión social y decidir nosotros cuándo queremos saltarnos la dieta. Una cosa que ayuda mucho es tener soporte familiar; es muy complicado hacer una dieta así cuando eres el único miembro de la familia que la sigue.
Efectivamente, eliminar los alimentos procesados ya es un gran paso que nos acerca a la vida saludable. Pero cuidado porque los alimentos procesados nos rodean. Por ejemplo, un paquete de galletas «saludables» con fibra de frutas y edulcoradas con azúcar de caña es un alimento altamente procesado y no es saludable aunque en el paquete ponga que lo es.
Viendo el ejemplo de Pepe en el ultra, compruebo que uno de los platos estrella es el arroz; no es éste un alimento no recomendado precisamente? Al igual que con las patatas, unos dicen que sí, otros que no… Estoy un poco hecho un lio…
Por cierto, hoy he hecho el desayuno que jamás creí sería capaz de hacer: tortilla francesa, una loncha de jamón serrano, un plátano, una manzana y un café solo con una chispita de miel.
Bravo por ese desayuno, Joan. A partir de este momento importante en el que has conseguido desayunar como creíste que nunca podrías hacerlo ahora sólo se trata de ir haciendo variaciones en función de tus gustos, el hambre que tengas, y el ejercicio físico que hagas ese día. Si notas que te quedas con hambre añade proteínas y grasas saludables (otro huevo o un trozo de aguacate, por ejemplo) que es lo que te saciará a la vez que te aporta nutrientes esenciales.
El tema del arroz requiere una explicación un poco larga pero trataré de no extenderme mucho. Es estilo de alimentación paleo no es una cosa cerrada y limitada a unas normas concretas, hay diferentes maneras de hacer esta dieta y no todo el mundo es igual de estricto. Al final, el hecho de ser más o menos estricto dentro de un estilo de alimentación determinado dependerá de las diferencias individuales, de si padecemos alguna enfermedad, de la cantidad e intensidad de actividad física que hagamos… El hombre del paleolítico se las apañaba apenas sin carbohidratos. Nosotros sí que disponemos de esos alimentos y a pesar de que sabemos que consumirlos puede ser una fuente de problemas podemos decidir no renunciar completamente a ellos, al menos a algunos de ellos. El motivo para decidir eso puede ser una carrera. ¿Es necesario consumir arroz para poder afrontar una competición de ese tipo? Probablemente no, pero si queremos consumir carbohidratos, el arroz (blanco, no integral) es una opción menos mala que el trigo o el maíz. Y todavía sería mejor optar por la patata. De cualquier modo yo pienso que el arroz no debería formar parte de esta dieta salvo momentos puntuales.
No sé si te estoy haciendo un lío, lo que quiero decir es que dentro de un grupo de alimentos sospechosos no todos son igual de malos. Dentro de los cereales, el arroz suele causar muchos menos problemas que el trigo, aunque como cereal que es contenga también antinutrientes. Así, a la hora de hacer una excepción, maltrataremos menos nuestro cuerpo si comemos una paella que si nos comemos un plato de pasta. Y en una carrera será mejor tomar arroz blanco para reponer carbohidratos que un bocadillo, pasta o galletas.
Dicho esto, vuelvo a insistir que en tu caso, por el tema de la enfermedad autoinmune, lo mejor sería ser lo más estricto posible y de momento olvidarte completamente de los cereales y los lácteos.
De nuevo, muchas gracias por las molestias que te tomas al escribir dando tantas explicaciones. 🙂
He dado un paso más, jeje.
La comida ha constado de una gran ensalada porque tenía que irme pitando y llevaba nueces, atún de lata, cebolla, olivas, pasas, jamón york y algo de pimiento rojo aparte de la lechuga, claro.
La verdad es que suelo tener bastante fuerza de voluntad, y cuando oyes sobre algo que tiene bastante lógica, y además estás un poco harto de ir pasando brotes y tomando antiinflamatorios, pues te agarras a ello. La verdad es que tengo bastante fe en que pueda darme resultado, aunque también he de confesar que he empezado en un momento algo crítico (en poco más de una semana corro la marcha cicloturista Quebrantahuesos) y me gustaría por lo menos acabarla dignamente (ya que el último brote de uveítis me ha impedido entrenar como es debido el último mes) y no estar pensando en la temible pájara o como diría el gran Perico, en el «Tío del Mazo».
Aunque es ahora cuando me vienen a la cabeza cosas como que a mí, en los desayunos que hacemos con la grupeta, me solía sentar muy mal el bocata y que dejé de hacerlo porque luego me venía un bajón importante de rendimiento. Es por ello, que últimamente sólo comía algún plátano o barrita junto con el café con leche, siendo más soportable el regreso. Entonces no tenía ni idea de Paleodietas ni nada que se le pareciera, y ahora puede que le haya encontrado la explicación.
Imagino que el libro «Paleodieta para deportistas» está más que recomendado, ya que mi rutina normal hubiera sido hacer la descarga de hidratos para su posterior llenado antes de la competición, hinchándome de pasta.
Gracias de nuevo, salud! 😉
Hola Joan.
Encantada de explicarte lo que sé. Veo que es cierto eso de que cuando te pones con algo te pones de verdad, supongo que tus problemas de salud tienen parte de culpa de que eso sea así. En ese sentido me siento identificada, lo he pasado mal con la salud y no quiero volver atrás por eso me tomo la dieta muy en serio.
Aunque quieras comenzar ya a cambiar tu dieta radicalmente, teniendo la Quebrantahuesos tan cerca quizá sea mejor que seas un poco más conservador. Podrías limitarte a eliminar los cereales con gluten que son los más problemáticos. El vaciado de los depósitos de glucógeno se puede hacer con el ayuno intermitente y el entreno en ayunas, pero hay que habituar al cuerpo poco a poco y ahora no tienes tiempo para hacerlo. Quizás no sea buena idea hacer ahora experimentos y reducir en exceso los carbohidratos porque como tu cuerpo no está entrenado en usar las grasas puede que en la competición acabes pagándolo. Yo de ti seguiría consumiendo carbohidratos pero me centraría en las patatas, arroz y frutas (el platano es excelente). Si quieres consumir pasta búscala sin gluten; probablemente te sentará mejor y también son carbohidratos (la de la marca Schär está bien de sabor y precio y la venden en cualquier tienda de dietética). En cuanto a la alimentación durante la carrera, no hagas experimentos ahora, toma lo que sea que te haya sentado bien en otras ocasiones. Esto es lo que haría yo. Y después de la Quebrantahuesos puedes empezar la dieta de manera más rigurosa.
Paleo Dieta Para Deportistas de Loren Cordain y Joe Friel es un buen libro, totalmente recomendable. Sin embargo, es un libro en el que se da por supuesto que el lector ya conoce la base de la paleodieta y algunas cosas se tratan muy por encima. Para saber más sobre paleodieta en general quizás es mejor La Dieta Paleolítica de Loren Cordain. Sin embargo creo que como primera lectura puede ser más interesante La Dieta Paleo de Robb Wolf. Vaya un lío te estoy haciendo, no sé si te estoy ayudando mucho mencionando tantos libros. Volviendo al libro por el que tú me preguntas específicamente, hay que tener en cuenta que ese libro ya tiene unos años durante los cuales el conocimiento ha avanzado y Cordain ha cambiado consecuentemente de opinión, por ejemplo, ha modificado su opinión hacia las grasas saturadas. Por eso y por alguna cosillas más me parece un muy buen libro pero hay que tomarlo como una referencia más no como «la referencia».
Espero no haberte liado demasiado. Saludos y nos vemos por aquí 😉
Muy interesante!!
Llevo un par de meses de transicion al minimalismo y cada vez mas contento (ya no vuelvo a amortiguadas ni de coña..). Estoy pensando seriamente en probar la paleodieta.. Solo le veo un problema… LA CERVEZA.. en serio.. amo esta bebida y dudo mucho tener la suficiente fuerza de voluntad como para dejarla de lado.. jeje
¿que opinas?
Un saludo
Hola, Jesus. Yo también comencé con el minimalismo y luego acabé haciéndome paleolítica aunque como ya comía sin gluten (soy celiaca) no tuve que enfrentarme al dilema de la cerveza, a ese me había enfrentado años atrás y ya la había apartado de mi vida.
¿Qué puedo decirte de la cerveza que no te de un disgusto? Tiene alcohol que hace trabajar a nuestro hígado y se transforma en azúcar en nuestra sangre, además tiene gluten (aunque no tanto como un simple trozo de pan) y… refresca cuando está bien fresquita pero no es agua. Y el agua es lo que deberíamos beber para calmar la sed. Lo que te puedo decir de la cerveza es que es una bebida perfecta para hacer una excepción de vez en cuando, pero debería ser eso excepción. Y los celíacos y personas con algún problema de autoinmunidad mejor olvidarnos porque hay cerveza sin gluten pero tampoco la considero una opción por varios motivos que no vienen a cuento.
Saludos.
Ok, Pesque, gracias por tus consejos, ya explicaré qué tal me va, de momento ya me puedo ir a dormir habiendo seguido la dieta Paleo en este día de cabo a rabo, jeje.
Salud!
De nada, Joan. Creo que ese día paleo que has tenido te habrá servido para ver que comer así no es tan complicado como parece.
Aunque no creo que sea adecuado cambiar radicalmente la dieta justo antes de un evento como la Quebrantahuesos sí que te he comentado que quizás podrías comenzar a quitar o reducir el gluten porque eso podría reportarte algún beneficio de cara a digerir mejor lo que comas, pero no supondría una disminución en la cuantía de carbohidratos ya que actualmente el mercado está lleno de productos sin gluten para celíacos. Suerte en la Quebrantahuesos, ya contarás.
Muy interesante el artículo. Voy leer sobre el tema para informarme. Hace tiempo que quiero darle un cambio a la alimentación.
Me leí el libro de Scott Jurek donde habla sobre su dieta vegana y parece que a él le va muy bien (su trayectoria le avala). Esta paleo dieta no la conocía. En cualquier caso, me suena mejor que la de Kilian Jornet, que suele comentar que su dieta base es pizza y Nutella 🙂
Hola Sergio.
Yo acabo de leerme el libro de Jurek, todo un ejemplo de superación. Un libro apasionante y motivador. Tenía mucha curiosidad por saber más sobre su dieta vegana y en el libro se habla bastante del tema. Está claro que a él le va bien haciéndola, negar eso sería de tontos, del mismo modo que a Tim Olson le va bien con su dieta paleo, pero es que yo creo que a estos monstruos les iría bien con casi cualquier dieta.
No considero que ser vegano sea lo mejor para mantenerse saludable, pero la dieta de Scott Jurek (lo que he leído en su libro de ella) tiene cosas positivas que la hacen preferible y mucho mejor a la dieta que él mismo dice que llevaba antes de hacerse vegano.
Mi manera de pensar y relacionarme con el mundo por una parte y mis gustos culinarios por otra hacen que desde siempre me haya sentido muy cercana al vegetarianismo. Me encantan las verduras y durante un tiempo traté de ser vegetariana porque creía que eso era lo mejor para mi salud y para el mundo. Mi salud no mejoró, lo que sucedió fue lo contrario. Eso no significa que mi experiencia sirva para todo el mundo. En mi caso ser vegetariana implicaba el incremento de la ingesta de cereales y eso para mi intestino es veneno.
De modo general creo que los seres humanos podemos comer prácticamente lo que queramos ya que tenemos una gran capacidad de adaptación. Esa capacidad nos permite vivir con casi cualquier combinación de nutrientes, otra cosa es que podamos prosperar así.
Te pondré un ejemplo. Soy celíaca con síntomas desde muy pequeña pero no me diagnosticaron hasta los 30 años. Hasta ese momento estuve metiendo en mi cuerpo cantidades industriales de veneno (cereales con gluten) y eso no me impidió crecer, correr e incluso ganar algunas carreras cuando era adolescente. Mi dieta era terrible, la peor posible para mí, pero me adapté. Eso no es gratis claro, comer mal durante años supone pagar un precio en salud.
Lo que quiero decir es que podemos encontrar ejemplos de éxito con casi cualquier dieta. Los humanos nos adaptamos más o menos bien, pero considero que hay alimentos que nos sentarán mejor que otros. Comer vegano puede ser saludable, dependerá de las personas y de cómo hagamos la dieta, pero tendremos que vigilar mucho lo que comemos para no tener déficit de algunos nutrientes esenciales que resulta muy fácil consumir si comemos carnes, pescados y huevos.
Desde luego yo creo que la paleodieta o la dieta de Scott Jurek son mucha mejor opción que lo que hace Kilian Jornet, pero quien se atreve a decir que no le funciona.
Creo que una de las claves para tener exito es volver a la cocina…cortar , rallar y hervir lo que vamos a comer, asi que olvidarse del microondas y la comida para llevar. He llevado la experiencia del no comer ciertas cosas desde hace un rato, mi mujer si bien no es celiaca tiene una intolerancia fuerte hacia el gluten, y yo no lo asimilo muy bien (pero quien realmente lo hace…no???) asi que cortamos con el gluten de golpe anios atras…y la verdad, ningun problema…yo como arroz si siento que mi nivel de energia esta bajando en el deporte, una vez o un par de veces a la semana y ya esta…no sigo la dieta paleo por cierto (vegetariano por tradicion…jajaja) , pero considero su concepto muy sencillo de seguir, y como mencionaba antes, tiene bastante informacion y comunidad, que si alguien desea hacer un giro radical en su vida, es muy importante… al final, es como el barefoot…si sales solo y no sabes que hay mas como tu, la presion social es muy fuerte, sin embargo, si sabes que hay mas locos haciendo lo mismo, tienes un apoyo que te mantiene…y al final te sientes tan bien que no quieres volver «al pasado» …
Asi que como clave, desde mi punto de vista, esta el saber lo que llevas a tu estomago, y crear todo el proceso …comprar, cocinar y comer. Estar mas ligado a lo que te energiza..
Hola Jano.
Pues sí, como dices es tan simple y a la vez tan complejo como comprar alimentos frescos y cocinarlos. A veces las cosas más sencillas son las que más nos cuestan. Cada vez hay más gente que no cocina y eso les hace completamente dependientes de los alimentos procesados. Comiendo así se produce una desconexión total con lo que comemos; mucha gente no sabe lo que come, y lo que es peor, no quiere saberlo.
¡Gluten! ¿Qué te puedo decir de esa dichosa proteína? Sienta mal a mucha gente, celíacos o no, pero forma parte del pan, el alimento central en nuestra cultura, y eso pesa mucho. Los celíacos somos sólo la punta del iceberg, el extremo más llamativo, pero son muchas las personas que lo digieren mal. Y creo que uno de los grandes problemas de la dieta de algunos vegetarianos es el abuso que se hace de los cereales y en concreto de aquellos más proteínicos, los que tienen gluten.
Magnífico artículo (o post) muy completo y sobre un tema muy relacionado con lo que nos une, correr. Soy corredor de maratones y ultras desde hace mucho (y minimalista de año y medio) y ya estoy disfrutando (por «culpa» de estos «cualquierapuedehacerlo») de la «liberación» de correr descalzo o minimalista. Además, me «desteté» hace cinco años (adiós a la leche). Por eso valoro muchísimo esta aportación tuya. Acabo de ver algunos de los enlaces que has puesto sobre el tipo de alimentos recomendados y me encantaría que siguieras aportando información, sobre todo del tipo de alimentos que aconsejas. Gracias y un abrazo (y cuidado con pisarme que no llevo nada en los pies), jejeje.
Hola Gabriel.
Cada vez somos más los corredores descalzos. Estos cualquieras han convencido a muchos de nosotros y siguen reincidiendo 😉 Me alegra que te haya gustado mi artículo y no te preocupes que seguiré por aquí escribiendo y aportando mi visión personal. Tranquilo que si tú no me pisas yo tampoco te pisaré. Hasta pronto.
Estoy muy de acuerdo con tu comentario sobre vegetarianismo!! muchos confunden no comer carne con comer sano…nada mas alejado de la realidad, para mi el primer paso para una dieta sana es comer lo mas «fresco» posible, y eliminar los productos alimenticios…tambien creo mucho en el ensayo-error con ciertos alimentos…que va, sea veganismo, paleo o vegetarianismo (y todas las que estan entremedio) tienen que ser balanceadas y tener como fundamento comer verduras (y muchas de ellas) frutas y en caso del paleo, carnes…pero de fuentes organicas, no procesadas…puse este video en face, pero lo repito aca…me parecio muy ilustrativo.
https://www.facebook.com/photo.php?v=132088600327388
Buen post, es grato ver experiencias directas en base a estilos de vida…
Hola Jano.
He comentado mi opinión sobre el vídeo en Facebook. Verás que no comparto todo lo que dice pero agradezco que lo hayas enlazado porque siempre es bueno confrontar ideas.
De acuerdo con lo que dices, el primer paso hacia una alimentación saludable es comprar alimentos frescos y cocinarlos. Si dejamos de comer procesados ya estaremos quitando, por ejemplo, una buena cantidad de azúcar y sal de nuestra dieta y eso de entrada sin grandes restricciones. En definitiva se trata de comer «comida de verdad». Encantada de «debatir» contigo. Saludos.
Hola, Pesque, de nuevo!
En fin, como ya dije, si me mete entre ceja y ceja algo, suelo ser bastante cabezón, y pese a tus consejos (lógicos y comprensibles por otra parte) de ser conservador teniendo a una semana vista la Quebrantahuesos, pues bien, yo he seguido erre que erre con la paleo, pero haciendo alguna excepción en la cena de ayer incluyendo una patata hervida junto con el pescado y las verduras a la plancha, ya que hoy tenía un entreno considerable (170km con 4000m de desnivel). El desayuno, sin demasiado tiempo, ha sido parecido a los días anteriores pero con huevo duro en vez de tortilla. Y para avituallarme, he pasado de las barritas de cereales y me he centrado en los plátanos y en algún gel, eso sí, que aún me quedan, un bidón con sales e hidratos que suelo llevar siempre que hay entrenos cafres y alguna fruta más que me comería a mitad de camino. Mi nivel ahora mismo dista mucho de ser el óptimo debido al parón ocasionado por el brote de uveítis, y la intención era aguantar lo máximo con la gente del club, y sobretodo no reventar, ya que no hacía quilometradas semejantes y con tantos puertos desde hacía mucho tiempo.
Las sensaciones nada más salir de casa ya han sido buenísimas comparadas con mis antiguos desayunos (antes, y si empezábamos subiendo aún más) solía tener molestias propias de la digestión, gases y una sensación como de tener el desayuno a punto de echarlo. En el día de hoy parecía que había comido hacía tres horas (y habían sido 20 minutos porque me dormí un poco). Y en el desarrollo del entreno, qué decir, he llegado derrotado (pero como todos), con un calor asfixiante que nos ha hecho, pero ni de lejos reventé, aguanté bastante bien y con el convencimiento que por lo menos, acabaré la QH. El hecho de haber abandonado de la noche a la mañana la ingesta de cereales, pan, pasta y arroces no me ha debilitado, es más, creo que me ha hecho un gran bien, y eso que llevo 4 días tan solo. Ni que decir tiene que esta semana previa a la gran cita voy a afianzarme en la dieta, ya no me da miedo no tener suficiente energía.
Al llegar me he acabado el plátano que me había sobrado, medio gel que me quedaba también, abundante agua (y más por el sol que nos ha dado) y un sobre de aminoácidos ramificados para reparar la destrucción muscular ocasionada. La comida ha constado de carne de cerdo al horno con patatas (digamos que el tema «patata» tanto hoy en la comida post-esfuerzo como en la cena previa ha sido contemplando la situación especial de dicho entreno, tal y como me comentaste). De todas maneras, no habiendo tenido en cuenta la dieta, tanto la comida como la cena hubieran sido pasta a todo meter, con lo cual ya es un cambio.
Quería agradecerte el haberme abierto esta puerta, que creo será un cambio muy positivo en mi salud, tanto en el día a día como en el tema deportivo. Tus explicaciones, argumentadas y pausadas, distan mucho de aquellas otras que encuentras por la red, demasiado «talibanes», que por el simple hecho de haberse redactado de ese modo, ya generan desconfianza y recelo.
Salud! 🙂
Hola Joan, de nada, gracias a ti por participar con tus comentarios y por plantear cuestiones interesantes.
Creo que yo habría hecho lo mismo que tú, pero no podía aconsejarte que ante un reto tan grande cambiaras radicalmente tu dieta, sin embargo me alegro de que el cambio te esté siendo positivo ;).
Sobre todo intenta no quedarte con hambre. Hay gente que al comenzar una dieta de este tipo reduce drásticamente los carbohidratos pero no lo compensa con otros alimentos y andan todo el tiempo muertos de hambre diciendo que ellos necesitan pasta y pan para rendir. Si te quedas con hambre simplemente come más, haz caso a tu cuerpo. Las grasas y proteínas son los alimentos que más saciedad te aportarán y una manera saludable de comer grasas es, por ejemplo, incorporando el aguacate a tus comidas.
Cada vez estoy más convencida de que esta dieta te irá bien para tu enfermedad. Tanto la Enfermedad de Crohn como la Colitis Ulcerosa (los dos tipos de Enfermedad Inflamatoria Intestinal) se considera que son espondiloartropatías. Parece que está bastante claro que en las espondiloartropatías hay permeabilidad intestinal lo que permite que entren al torrente sanguíneo tóxicos que no deberían entrar y que eso desencadena la enfermedad. Sin embargo, la medicina oficial suele obviar esa información y se centra en tratar los síntomas articulares con medicación que básicamente es paliativa. La relación entre intestino y sistema inmune cada vez está más clara por tanto no se entiende la poca importancia que se da a la salud intestinal.
Ya nos contarás tu experiencia en la Quebrantahuesos. Y me gustaría saber de tu adaptación a la paleodieta ya que tu caso me parece especialmente interesante. Por aquí seguiremos dando guerra con el tema de la dieta.
Hola Pesque, estoy leyendo tu blog hoy, con estos comentarios de hace un año. Hace 2 años exactamente en diciembre, me volví vegetariano, principalmente por filosofia de no matar a los animales. Entreno y he corrido maratones, sin embargo desde hace 4 meses empece con dolores muy fuertes en articulaciones, El fin de semana pasado después de 3 meses de ir a todo tipo de médicos parece que el dictamen es Espondilitis Anquilosante, menos mal no está basada en el gen si no que parece que fue la alimentación vegetariana que se basa principalmente en Legumbres.
Quisiera saber si conoces algún tipo de dieta que pueda conservar el vegetarianismo, lo que estoy considerando es por lo menos el pescado.
Ademas si desde que has escrito el blog has venido conociendo mas sobre este tema?
Gracias
Hola Alejo.
Entiendo y respeto tu opción por la comida vegetariana. Yo he sido durante mucho tiempo una convencida de esta opción alimenticia, sin embargo, la experiencia personal primero y los conocimientos adquiridos después me han llevado a la conclusión de que esta no es para nada la mejor manera de tener una buena salud. Al menos esta es mi opinión.
A día de hoy hago una dieta de tipo evolutivo estricta en lo que se refiere a la ausencia de alimentos que considero que me pueden perjudicar y que básicamente son: cereales, legumbres, lácteos, azúcar y procesados en general. Como mucho pescado y he aumentado la cantidad de carne aunque sigo comiendo poca (quizás demasiada poca).
Pienso que si optas por seguir con el vegetarianismo al menos deberías prescindir de los cereales, legumbres (sobre todo soja) y lácteos (si los consumes). Sé que eso puede complicar mucho la dieta pero probablemente ganes en salud. Comenzar a tomar algo de pescado puede ser una buena opción y no sólo por las proteínas ya que el pescado te aportará también grasa saludable muy difícil de conseguir con una dieta vegetariana. ¿Te has planteado también añadir huevos a la dieta? Pienso que consumiendo vegetales, frutas, huevos y pescado puedes conseguir una dieta equilibrada, aunque lo sería más si añadieras algo de carne de calidad. Sobre los huevos hay que tener en cuenta que es un alimento que puede causar problemas autoinmunes o alergias a algunas personas, por tanto primero tendrías que asegurarte de que te sientan bien.
Si finalmente prefieres mantenerte en el vegetarianismo/veganismo más estricto quizás te pueda ayudar el libro de Scott Jurek «Correr Comer Vivir». Jurek es vegano y en este libro expone su dieta. No pienso que una dieta de este tipo sea la más recomendable pero la propuesta de Jurek me gusta porque no se abusa (como suele suceder) de los cereales y cuando se consumen suelen ser germinados. Yo directamente no contemplaría los cereales como opción (tampoco germinados) pero el resto de la dieta no está mal. Aunque sigo pensando que le faltan cosas.
No conozco en detalle el tema de las espondiloartropatias pero estoy convencida (y cuanto más sé más me convenzo de ello) de que una dieta de tipo evolutivo puede ser un buen punto de partida para mejorar la salud en todas aquellas personas con trastornos autoinmunes. Según la persona es posible que además haya que hacer más cosas como evitar ciertos alimentos que pueden causar problemas (como las patatas, tomates, pimientos, huevos…) y tratar también los problemas digestivos.
Como puedes ver no hay solución mágica ni secreto alguno. En cuanto a gusto la opción vegetariana me gusta mucho pero pienso que la realidad se impone. Nos guste o no somos omnívoros y parece que basar nuestra alimentación en cereales y legumbres prescindiendo totalmente de los alimentos animales no sienta bien a nuestros cuerpos. Por eso te aconsejo que si sigues siendo vegetariano al menos destierra los cereales y legumbres (sobre todo soja) de tu dieta (además del azúcar y los procesados).
Espero que todo te vaya bien. Ya nos contarás cómo va todo.
Buenos días!
Lo del hambre es algo que me estaba mosqueando algo, y justamente ayer empecé a incorporar el aguacate, buena solución. 😉 Sin embargo, ¿es posible que esa sensación de hambre se vea incrementada por que el cuerpo esté acostumbrado a su pan, su pasta y sus cereales de siempre, y que ese «mono» sea cosa de días?
Por otro lado, me estoy asustando un poco, ya que si normalmente pesaba alrededor de 67 kg (mido 1’80m), ahora mismo estoy en 65 y bajando, y no llevo nada de tiempo! Si ya me decían que qué flaco me había quedado (llegué a pesar 84 en pleno apogeo de brotes en los ojos y en las sacroilíacas), ahora no se qué me dirán. La verdad es que por lo que se de pruebas de esfuerzo, donde además te toman las medidas de huesos, porcentaje de grasas y demás, sabía que era de huesos finos, y que podía bajar más de los 73kg que pesaba para cuando me hice la prueba. Y de hecho, es lo que dices en el artículo, por mucho deporte que hiciera, y ya estando en 67kg, el flotador no había manera de sacarlo. Espero que esta súbita bajada signifique la pérdida de esa grasa acumulada alrededor de la cintura, porque si no, me empezaré a preocupar.
En cuanto al tema médico, justamente hoy me tocaba la visita con el reumatólogo, el cual ante la pregunta de la dieta paleo me ha contestado que justamente lo que podría ser algo perjudicial son el exceso de proteínas, que siguiera una dieta equilibrada, que hiciera ejercicio, blablabla, vamos, lo que se suele decir, tampoco es un doctor con mucho diálogo, la verdad. Y para más inri, va y me receta de manera crónica (dos al día más protector gástrico) los antiinflamatorios que suelo tomar en momentos de sacroileítis, toma ya! Que si ahora es la «moda», que parece que eso suele ayudar a paliar los brotes… Y yo que lo que quería era tomar cuantas menos pastillas mejor, en fin, me parece que a las pastillas les van a dar viento fresco.
Por último, me gustaría saber cómo comer Paleo sin gastarse demasiado, ya que haciendo números, ya vemos que el gasto está siendo mayor que el ahorro que supone no comprar pan y demás cosas «prohibidas», ese artículo de la cesta de la compra lo espero «en candeletas», jeje.
Salud! 🙂
Hola otra vez, Joan.
En cuanto a la sensación de hambre, es cierto que una parte, al menos al principio, es más deseo de carbohidratos simples que hambre, algo a lo que nuestro cuerpo se había acostumbrado. Los chutes de glucosa son muy atractivos para nuestro cuerpo y probablemente nuestro cerebro eche de menos las exorfinas de los cereales. De cualquier modo es algo temporal y si haces una dieta rigurosa ese tiempo se reduce. De todos modos insisto en que no te quedes con hambre. Quizás al principio notes que necesitas comer más y luego tu apetito se vaya regulando, pero quedarse con hambre no es buena idea porque si lo haces no podrás resistirte a comer cualquier cosa que se te ponga delante. Contra el hambre siempre tenemos las de perder. Además del aguacate otra buena opción son los frutos secos. Puedes llevarlos contigo y tomarlos en cualquier sitio. Intenta que en cada una de tus comidas haya carbohidratos (verduras y hortalizas), proteínas y grasas. La cantidad de vegetales ha de ser importante aunque eso equivalga una cantidad pequeña de carbohidratos. Y no te refrenes con la grasa, que es la que te saciará.
Es normal que pierdas peso. Y no me sorprende que tengas una estructura ósea fina. Si es cierta la relación entre intestino permeable y espondiloartropatías es posible que eso haya influido en que tu estructura ósea sea menos densa. Quizás deberías hacerte una densitometría ósea para saber si tienes osteopenia. Yo también peso muy poco y adelgacé con el cambio de dieta, pero a la vez gané musculatura. Finalmente dejé de preocuparme porque, ¿para qué quería pesar más si cuando pesaba más estaba menos fuerte?
En cuanto a las recomendaciones de tu médico… Voy a intentar no sulfurarme demasiado. No seré yo quien critique su saber médico pero sí conozco lo suficiente de nutrición como para saber que lo que ha dicho no tiene ningún sentido. La dieta paleo es una dieta sin azúcar, cereales ni legumbres. Se consumen carnes, pescados, huevos, verduras, frutas, frutos secos… Partiendo de esa base existen muchas combinaciones. Algunas incluyen más carbohidratos, otras menos. La diferencia con las llamadas dietas balanceadas está más en el tipo de carbohidratos que en la cantidad en sí. Dicho esto, en una dieta de este tipo suele haber menos carbohidratos, más grasas y LAS MISMAS PROTEINAS. La diferencia básica suele estar en el aumento de grasas, no de proteínas. En cuanto a lo de que tomar muchas proteínas daña los riñones es un mito que una y otra vez está siendo derribado por los estudios que se hacen al respecto. Sabemos que comer sólo proteínas sin grasas ni carbohidratos es tóxico y mortal (inanición canicular) pero estamos hablando de una situación que sólo se produce en situaciones extremas en las que es imposible consumir nada que no sea pura proteína. Podría extenderme mucho más sobre esto pero creo que no es el lugar, sólo recordaré que una de las cosas que más claras se tienen en nutrición es que hay aminoácidos esenciales, hay ácidos grasos esenciales pero NO hay carbohidratos esenciales.
¿Te ha prescrito medicamentos para tomar de manera preventiva? Supongo que no serán AINES. ¿Se trata de inmunosupresores o de anticuerpos monoclonales? Yo no soy quién para cuestionar el criterio médico pero soy muy escéptica con ciertas prácticas. La experiencia me ha llevado a desconfiar de ellas. Yo estuve tomando una medicación para prevenir unas migrañas bestiales porque también era la “moda” y eso me postró durante cerca de un año. Aunque es sólo mi opinión. Respecto a lo de tomar cada día Omeprazol, es algo que puede ocasionar muchos problemas de salud a la larga; hipoclorhidria, malabsorción de algunos nutrientes, mal funcionamiento del sistema digestivo, problemas óseos… No te estoy diciendo que no tomes la medicación pero tomar un medicamento debería ser una decisión conjunta médico-paciente, no una imposición médica y más cuando se trata, como en este caso, de medicamentos que no han mostrado de manera clara su eficacia en la disminución de la cantidad ni de la intensidad de las crisis (corrígeme si me equivoco porque no conozco el tema en profundidad).
Por último, la mala noticia de esta dieta es que sí que te gastarás más dinero. Hay algunas formas de evitar que el gasto se dispare, por ejemplo, comprar y cocinar productos frescos de temporada. Sin embargo probablemente acabarás gastando más dinero; algo inevitable porque los macarrones son más baratos que las zanahorias o el pescado. De todos modos, sí cuenta también todo lo que no te gastas en comida vacía: precocinados, refrescos, dulces… Todo eso es carísimo teniendo en cuenta que nutricionalmente es nada.
Y, ahora sí, para acabar, pensando en tu caso particular te recomendaría que evitases todo tipo de gluten, incluyendo las trazas. Si necesitas más información puedes consultarme personalmente en Twitter o en mi blog personal.
Gracias de nuevo, Pesque, hoy hemos estado con una doctora bastante más (a mi modo de ver) abierta, dialogante y coherente, cualquier novedad ya pasaré por tu blog, no quiero que esto acabe siendo mi diario.
Salud!
De nada, Joan. Es placer intercambiar ideas contigo. Te comenté lo que pasarte por mi blog porque si finalmente decides hacer una dieta totalmente exenta de gluten allí encontrarás información más específica, porque comer sin gluten no es tan fácil como parece (aunque comas paleo). Dado que en tu caso hay una enfermedad de por medio quizás quieras ser más estricto y el gluten está en muchos sitios, incluso en alimentos teóricamente exentos del mismo. Esto no es aplicable a la mayoría de la gente a la que unas trazas no le harán daño.
Sin embargo no hay problema en que me preguntes por aquí o por dónde sea de lo que quieras 🙂 Aunque no lo creas yo también aprendo con lo que me cuentas y seguro que no soy la única.
Suerte en la Quebrantahuesos. Nos vemos.
Buenas de nuevo!
Lo prometido es deuda, ya corrí la Quebrantahuesos!
La verdad es que bastante contento con el resultado, si bien la falta de entreno el mes que estuve con el brote de uveítis me quitó ese óptimo estado muscular, el fondo y el aguante ya lo tenía, gracias a la base del invierno. El tiempo oficial (contando que paré bastantes veces para estirar debido a los calambres) fue de 8:17, que para ser mi primera edición, todo el mundo me dice que está de coña. Me queda la espinita de saber que podría haberlo hecho mucho mejor, y así se que volveré, jeje.
En cuanto a la dieta, seguí haciendo las cosas como comentamos, pero con algunas salvedades. Felizmente, ya he superado la fase de apetito canino, y me encuentro mucho más estable a lo largo del día, siendo lo normal últimamente hacer 3 comidas diarias, intercalando a veces, a media mañana o por la tarde, unas nueces, dátiles o alguna pieza de fruta.
Por la noche, he dejado de comer fruta y alimentos crudos, y lo cocinamos todo (pescado al vapor, verdura hervida, cremas de verdura, tortillas o revueltos…) y paso mejor noche que antaño. Uno, poco a poco, va viendo qué es lo que más le apetece y qué sienta mejor o peor dependiendo del momento del día. Sin embargo, la ingesta global de verduras y frutas se ha incrementado notablemente, ya que tanto en el desayuno como en la comida caen varios de estos alimentos. Una de las mejores sensaciones es la de comer con gana los platos de carne o pescado que tocan, sin miedo a pensar que voy a reventar, ya que, y esta es una de las mejores cosas que ha conllevado el dejar los cereales y el pan, la bajada de peso fue espectacular como ya comenté en otro comentario. Según la médico de la que hablé (partidaria sobretodo de comer productos frescos y eliminar los procesados, no tanto de una paleodieta en sentido estricto), el hecho de eliminar los cereales conllevó que dejara de retener líquidos, cosa siempre positiva. En estos momentos, y después de la Quebranta y un entreno que hice ayer de 140km, mi peso se ha estabilizado en torno a los 64kg cuando una semana antes, rondaba los 67.
Sin embargo, y comentándolo con la doctora, hemos decidido no ser tan estrictos, en parte por la elevada actividad deportiva y por otro lado, porque el número de brotes que he sufrido los últimos años se han ido espaciando más y más en el tiempo, lo cual no significa que no tenga la enfermedad, pero por lo menos es más llevadera. De alguna manera, y tomando como ejemplo las pautas de alimentación de Pepe en el ultra, los días que rodean competición o fuerte entreno combino la dieta habitual con alguna ración de carbohidratos, básicamente arroz o patata. La pasta no la he vuelto a probar, y el pan lo he limitado a una rebanadita estrecha en la comida y en la cena, básicamente para empujar la comida 🙂 y para rebañar la salsa del plato en cuestión, lo cual es, bajo mi criterio, nada, comparado con el pan que devoraba antes. La leche tampoco la he vuelto a tomar, y únicamente como queso curado muy de vez en cuando, y sin atiborrarme.
Otro de los aspectos que rodean la dieta paleo con el deporte es el entreno en ayunas, y el ir añadiendo alimentación (básicamente plátanos más algún gel y bebidas con sales e hidratos) en el mismo a medida que pasan las horas y la intensidad. Lo puse en práctica ayer mismo, con un resultado espectacular, 140km con 1500m de desnivel positivo, y una sensación de fuerza bestial, mucho mejor que dos días antes en la Quebranta; sin duda, la propia marcha me dio ese puntillo que me faltaba, pero además, la dieta (con sus salvedades) no me ha debilitado lo más mínimo, el cual era uno de los miedos que tenía, acostumbrado a atiborrarme de pasta por el temor a no rendir lo suficiente. Muy contento, pues, en ese aspecto, con la Paleodieta NO se rinde menos, es más, el hecho de perder líquidos y bajar peso es una mejora inmediata ya que nuestro Máximo Consumo de Oxígeno se ve incrementado. El otro aspecto reseñable es la recuperación post-esfuerzo, muy, muy rápida, más que antes, con ganas de caña al poco tiempo de una paliza.
Ahora, estamos en la fase (mi mujer no es que secunde la paleodieta al 100% pero se adapta en comidas y cena) de buscar diversas opciones de alimentación ecológica para hacer aún más saludable todo el proceso alimenticio. Hemos visto algunas web que comercian con dicho género a nivel de barrio y de ciudad, y en ésas estamos.
Salud!
Que alegría… Joan !!
Sigue contandonos que a todos nos interesa.
Gracias
Hola, Joan, no sabes la alegría que me dio leer tu comentario. He estado ocupada y por eso no he dicho nada hasta ahora. ¡Enhorabuena!
Me parece muy interesante tu experiencia. Estoy impresionada con el hecho de que te hayas adaptado tan rápidamente al cambio de dieta y más enfrentándote una prueba tan exigente como la Quebrantahuesos. Eso significa que estás haciendo las cosas bien porque cuando no es así el cuerpo se queja.
Aunque no es un requisito de la paleodieta yo tampoco tomo nada crudo por la noche porque hay bastantes posibilidades de que me siente mal.
La patata y el arroz no me parecen malas opciones cuando necesitas incrementar la cantidad de carbohidratos. Tú mismo irás viendo cómo de estricto has de ser para estar bien y en qué cosas puedes saltarte la dieta sin que eso afecte a tu salud. De manera general, de entre todos los cereales el que causa más problemas es el trigo y uno de los que mejor sientan es el arroz. A mí al principio me costó dejar de tomar pan, o algo parecido, para acompañar las comidas. Como soy celíaca comía grandes cantidades de tortas de arroz y maíz (me sentaban mejor que el pan sin gluten) y al principio tenía que comerme al menos una en cada comida pero luego me di cuenta de que no necesitaba comerlas y ahora sí que no como ningún cereal. Si me salto la dieta puntualmente es con otras cosas.
Lo de la retención de líquidos y la pérdida de peso consecuente tiene que ver con el efecto antiinflamatorio de la dieta. Me parece muy interesante que tú hayas notado tan pronto algunos de los efectos beneficiosos y que además nos los cuentes. Espero que nos sigas contando como te va.
Saludos.
Tanta información en internet a uno lo vuelve loco… En este artículo se dice que hagas ejercicio en ayunas!! en fin? es bueno o no es bueno?
Perdón que NO HAGAS!!
http://www.soymaratonista.com/1432/corredor-en-ayunas
Hola Toni.
Es cierto que la información disponible en Internet es tanta y tan contradictoria que resulta difícil que algo quede claro. Yo personalmente tengo dos formas de discriminar la información para saber con cual me quedo. En primer lugar trato de contrastar buscando fuentes lo más objetivas posibles, lo que incluye lo que dice al respecto la ciencia. En segundo lugar está la experiencia personal, algo que no puedo dejar de tener en cuenta cuando hablamos de nutrición, campo en el que influyen muchos condicionantes personales.
El conocimiento científico en el terreno de la nutrición ha cambiado mucho en los últimos tiempos y sigue haciéndolo, por tanto a la hora de saber a qué atenerse con la información circulante en la red hay que tener eso en cuenta y no tener miedo a cambiar de opinión y reconocer que algunos conceptos que creíamos verdades absolutas no lo son. A muchas personas les cuesta mucho hacer eso y por eso, supongo, que muchos conceptos erróneos se siguen repitiendo una y otra vez en diferentes sitios. Un ejemplo claro de cómo han cambiado las cosas en los últimos tiempos es lo que ha pasado con las grasas, que han pasado de villanas a nutriente imprescindible (a excepción de las grasas vegetales hidrogenadas, conocidas como trans).
Por otra parte algo que tengo claro que no se puede obviar es la experimentación personal. Puedo leer muchos argumentos, consultar estudios científicos y creerme o no lo que dicen unos y otros, pero está claro que yo individualmente no voy a convencerme de algo hasta que no lo pruebe y vea realmente cuán efectivo es. Es algo parecido a lo que me pasó con el barefoot running. Por mucho que leía y veía vídeos de otros corriendo descalzos no fui capaz de entender muchas cosas hasta que no me descalcé y comencé a correr. Con la paleodieta me pasó algo parecido; había leído mucho y consultado muchos estudios pero aun así tuve que probarlo para convencerme realmente de algunas cosas.
Mi experiencia personal me llevó de entrenar en ayunas (cuando era jovencita) a, años después, forzarme a comer antes del entreno porque había leído en algún sitio que eso era lo mejor a, finalmente, volver de nuevo al entrenamiento en ayunas, ahora ya basando mi experiencia en un conocimiento más sólido. Explicar exactamente los razonamientos que hay detrás de este cambio de opinión sería muy largo pero me gustaría lanzar al aire un par de reflexiones sobre este tema. En primer lugar, desde el punto de vista evolutivo no tiene sentido que necesitemos comer antes de hacer ejercicio cuando lo que sucedía (y sucedería en estado salvaje) es que primero hacemos ejercicio (vamos en busca de comida) y luego nos la comemos. En segundo lugar, ¿te has fijado en las fotos de Tim Olson? No es precisamente un corredor extremadamente delgado y poco musculoso. Se supone que haciendo dieta paleo debería serlo porque según el texto si no ingerimos abundantes carbohidratos el cuerpo utiliza músculo para fabricarlos. Eso es así, pero sólo cuando la duración e intensidad del ejercicio pasa ciertos límites que no se dan en la mayoría de entrenos. Por ello Tim Olson y Pepe Roldán consumen carbohidratos y proteínas a lo largo del recorrido de un Ultra. La diferencia entre ellos y otros corredores con una alimentación más “convencional” es que usan los carbohidratos pero no dependen de ellos puesto que han “enseñado” a su cuerpo a utilizar las grasas en combinación con los carbohidratos. Una de las maneras de hacer ese aprendizaje es el entrenamiento en ayunas.
Como he dicho antes, la experimentación personal no ha de desdeñarse en temas de nutrición, por ello creo que puede estar bien probar sin prejuicios y ver qué pasa. Prueba a desayunar leche galletas y fruta y luego sal a correr. Otro día levántate y sal a correr sin más. En mi caso lo tengo claro, salir a correr con la barriga llena va a causarme un problema puesto que mi cuerpo tendrá que enfrentarse al dilema de dar prioridad a mis piernas o dársela a mi estómago. Y eso sin pensar en picos de glucosa ni en el tipo de combustible usado. Cuando salgas en ayunas quizás pienses que te va a dar una pájara en pocos minutos y quizás descubras que no. El entrenamiento en ayunas debe entrenarse poco a poco y el primer día no deberías forzar demasiado pero si eres como yo verás con sorpresa que hay energía más allá de la ingesta constante de carbohidratos.
No sé si te he aclarado algo, pero en última instancia tendrás que elegir tú qué información te parece más fiable. Aquí seguiremos escribiendo sobre estos temas y quizás con el tiempo podamos ayudar a despejar algunas dudas. De cualquier modo siempre son bienvenidas las cuestiones que ayudan a ampliar el debate y con ello a aumentar el bagaje de conocimientos de cada uno.
Saludos.
Simplemente me gustaria decir que si este articulo se basa en la ciencia…..pon algún artículo que diga que la falta de hidratos de carbono mejora el rendimiento o pon otros donde hablen de que la carga hidratos lo mejora…..!!NO??
Conoceis a Bourke, jeukendurp, Cox, Maughan….Padres de la nutrición deportiva…pues bien, su oponión es OPUESTA al artículo……
cuestión de valorar…
por cierto que tiene que ver el gluten con los carbohidratos???
Gracias, un saludo
Hola, Javier. Bienvenido.
En primer lugar, como tú mismo puedes observar este no es un artículo científico ni pretende serlo. Se trata de un artículo informal de tipo divulgativo en el que en aras de la claridad y la accesibilidad he prescindido conscientemente de las referencias científicas, pero eso no significa que no existan. Por otra parte, la interpretación que yo hago de lo que podría ser la filosofía de “Cualquiera Puede Hacerlo” lleva implícita la aportación proveniente de la experiencia personal como parte importante del contenido de los artículos. Así pues, estos son los dos componentes en los que me he basado para escribir el artículo: conocimiento científico por una parte y experiencia personal por otra.
Aportar datos científicos detallados supondría, no ya escribir otro artículo diferente, sino escribir un libro sobre nutrición evolutiva para deportistas y no es mi intención hacerlo. De hecho ya los hay publicados. Si te interesa el tema y las referencias científicas puedes consultar, para empezar, el libro “Paleodieta para deportistas” escrito por Loren Cordain y Joe Friel. Al final del libro encontrarás 26 páginas de referencias científicas.
Volviendo a tu demanda de referencias científicas concretas, pienso que éstas pueden ser realmente interesantes pero también considero que no tiene mucho sentido buscar referencias escogidas cuidadosamente para que coincidan con mis planteamientos previos y así poder demostrar ideas preconcebidas. Si buscamos cuidadosamente seguro que los dos podemos encontrar referencias que parezcan contradecir las del otro. Este cherry picking es una manera un tanto tramposa de discutir sobre ciencia.
Sin embargo, dado que preguntas de manera explícita sobre los carbohidratos, trataré de esbozar una respuesta.
En primer lugar, este artículo versa sobre la llamada paleodieta o dieta evolutiva, no sobre los carbohidratos. En ningún momento se dice que “la falta de carbohidratos” mejore o empeore el entrenamiento. Esta no es una dieta baja en carbohidratos (low carb). De hecho en la única foto de comida del artículo aparecen alimentos básicamente ricos en carbohidratos (calabacín y coliflor). Quizás la confusión venga dada por la errónea creencia por parte de algunas personas de que sólo hay carbohidratos en los cereales ya que, eso sí, ésta es una dieta en la que no se consumen cereales, pero sí que se consumen otras fuentes de carbohidratos: frutas y verduras.
Dicho esto, en el artículo sí que digo que dependemos en exceso de los carbohidratos como casi único combustible para el ejercicio físico de resistencia y que no podemos olvidar la otra fuente importante de energía de que disponemos, mucho menos cuando vamos a pasarnos horas haciendo ejercicio. Me refiero a la oxidación de las grasas.
El porcentaje total de carbohidratos en las dietas de tipo evolutivo varía mucho en función de múltiples circunstancias pero no considero que un deportista pueda ni deba prescindir de los carbohidratos, eso sí, sin llegar a depender totalmente de ellos. La clave para hacerlo está, como ya he dicho, en las grasas, en su consumo como parte de una dieta saludable y en “enseñar” al cuerpo a utilizarlas.
Como te dije antes, no creo que ir poniendo estudios concretos descontextualizados sea lo mejor pero aquí tienes algunas referencias:
Estudio de Costill DL. sobre el uso de carbohidratos antes, durante y después del ejercicio físico: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/3967778
Estudio de Lambert EV et al. sobre la mejora de la resistencia en ciclistas a intensidad moderada tras sólo dos semanas de adaptación a una dieta rica en grasas: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/7851362
Por otro lado, ¿qué tiene que ver el gluten con los carbohidratos? En principio nada, excepto que las únicas fuentes de gluten son también las fuentes de las que la mayoría de la población obtiene los carbohidratos: los cereales. Si quieres saber más sobre el gluten aquí tienes una explicación sencilla de a qué nos referimos normalmente cuando hablamos de gluten: http://corrersingluten.blogspot.com.es/2013/01/el-tipico-articulo-que-encuentras-en.html
La palabra gluten aparece una sola vez en el texto del artículo y en más ocasiones en las respuestas a los comentarios. En la primera ocasión aparece porque, como he dicho antes, una de las cosas que pretendo plasmar en este artículo es mi experiencia personal y yo, en tanto que celíaca, hago una dieta sin gluten. En los comentarios hablo del gluten por la relación entre el gluten y los trastornos de tipo autoinmune y por su implicación en diferentes problemas de salud, no sólo entre los celíacos.
Una vez más no me estoy inventando nada así que aquí te pongo algunas referencias:
“¿Puede ser el gluten perjudicial en pacientes no celíacos?”. Artículo publicado por Diaz Marugan V, et al. en “Evidencias en Pediatria”: http://www.evidenciasenpediatria.es/files/41-11865-RUTA/001Editorial.pdf
Sobre la relación gluten y esclerósis múltiple: http://redpacientes.wordpress.com/2011/05/03/prevalencia-de-la-enfermedad-celiaca-en-esclerosis-multiple-desde-el-punto-de-vista-de-un-investigador/
Sobre la celiaquía y su relación con trastornos neurológicos: http://neurobsesion.com/2009/12/23/la-enfermedad-neurologica-por-intolerancia-al-gluten-por-carlos-h-lahoz/#comments y http://neurobsesion.com/2010/03/09/la-enfermedad-neurologica-por-intolerancia-al-gluten-2%C2%AAparte-por-carlos-h-lahoz/
Quizás sigas pensando que el hecho de que el gluten se haya relacionado con múltiples patologías no tiene que ver con el tema objeto de este artículo pero te diré por qué estás equivocado. Este artículo habla de “paleodieta”, una dieta en la que se prescinde de los cereales no porque sean una fuente de carbohidratos sino porque se trata de alimentos que causan diferentes problemas de salud a causa de su contenido en antinutrientes (de ellos uno de los más problemáticos es el gluten).
Si quieres saber más sobre el tema te recomiendo que leas a Loren Cordain. Aquí tienes un artículo no muy largo en el que habla de los cereales y, en la página 42, de los antinutrientes contenidos en los mismos (incluido el gluten): http://www.direct-ms.org/pdf/EvolutionPaleolithic/Cereal%20Sword.pdf
Si te interesa el tema puedes consultar también este otro artículo: http://www.dovepress.com/comparison-with-ancestral-diets-suggests-dense-acellular-carbohydrates-peer-reviewed-article-DMSO
Espero haberte haber aclarado alguna de tus dudas. Como ya he dicho en otras ocasiones, mi intención no es convencer a nadie de nada pero espero haber servido de ayuda. Saludos.
En el libro de Gary Taubes, ‘Cómo engordamos’ habla de que la fruta tampoco es recomendable. ¿Qué opinas?
Hola, Josep. Gracias por comentar.
La pregunta que haces es muy interesante y probablemente por eso sea una pregunta difícil de responder de manera concisa. Durante el tiempo en que llevo aprendiendo de otros y experimentando con la dieta paleo he ido cambiando mi opinión con respecto a la fruta hasta llegar a mi posicionamiento actual, que no puedo asegurar que sea el correcto pero sí que es al que he llegado. Trataré de responderte explicándote un poco esta evolución y los motivos que me han llevado a ella.
En primer lugar te diré que no seré yo la que contradiga a Gary Taubes ya que considero su libro «Como engordamos y qué hacer al respecto» (el único suyo traducido por el momento al español) prácticamente de lectura obligatoria. Sin embargo no estoy del todo de acuerdo con él en el tema de la fruta, aunque está claro que lo que dice no lo dice porque sí. Hay que tener en cuenta que el libro de Taubes está dedicado a explicar los motivos por los que engordamos y por eso se centra en la obesidad y en qué hacer al respecto. Tal y como dice Taubes, si queremos adelgazar debemos reducir la cantidad de carbohidratos en nuestra dieta. La fruta es rica en carbohidratos y si queremos adelgazar deberíamos limitarla. La mayoría de personas sedentarias tomarían excesivos carbohidratos si consumiesen fruta a diario. Las autoridades sanitarias insisten en que la fruta y la verdura son intercambiables en esas 5 raciones diarias que nos recomiendan pero eso no es así. Las verduras, sin duda, deben tener mayor protagonismo que la fruta en cualquier dieta saludable.
¿Eso significa que deberíamos limitar el consumo de fruta? Sí y no, la respuesta depende básicamente de nuestra actividad física. Si hacemos mucho ejercicio necesitaremos una mayor cantidad de carbohidratos para mantener y mejorar nuestro rendimiento y en ese caso la fruta es una mejor opción que los cereales. Pero eso no es todo. También hay que tener en cuenta que en general nuestra capacidad para asimilar la fruta no es demasiado alta y varía en cada persona. Así que quizá no para todos los que hacemos mucho ejercicio aumentar el consumo de fruta sea una buena idea. Me explicaré contándote mi experiencia.
Cuando comencé con la dieta paleo aumenté considerablemente la cantidad de fruta que consumía y durante un tiempo me fue bien. Sin embargo, llegó un momento en que mi cuerpo comenzó a quejarse; tenía problemas intestinales que parecían estar relacionados con el consumo de fruta. Leí bastante información acerca de los problemas que puede llegar a causar la fructosa y la dificultad para asimilarla que tiene en mayor o menor medida un porcentaje importante de personas. Buscando mejorar mi salud me fui al extremo contrario y dejé casi de consumir fruta. Sin embargo me di cuenta de que no toda la fruta parecía sentarme igual de mal. Decidí buscar información sobre el contenido en fructosa en los diferentes tipos de frutas y así averigüé el motivo por el que, por ejemplo, el plátano me sentaba bien pero no el melocotón.
En resumen, mi opinión sobre el consumo de fruta es que no es ese alimento maravilloso que nos han dicho que es, sin embargo yo no me atrevería a decir tampoco que hay que evitarla. Pienso que, en principio, no hay motivos para eliminarla de nuestra dieta, y más si hacemos ejercicio, pero sí que hay que consumirla con cierta precaución, averiguar cuánta podemos asimilar y de qué tipo y tratar de no rebasar ese límite. Si queremos aumentar el consumo de carbohidratos tenemos opciones muy interesantes que no son fruta como, por ejemplo, el boniato.
No sé si te he aclarado tu duda o mi respuesta ha servido para liarte un poco más. En todo caso espero haber servido de ayuda.
Saludos.
La dieta Paleo promueve un alto consumo de frutas y verduras, lo que me preocupa es que si como mas fruta estaria ingeriendo poco mas de 50 gr de fructosa, un tipo de azucar que no se digiere como la glucosa sino es metabolizada solamente en el higado, lo que desencadena una serie de problemas metabolicos, y ademas engorda bastante. Esta informacion lo he leido en muechas webs, incluso el Dr Mercola siempre dice tener cuidado con la fruta, que se debe ingerir limitadamente. Agradecere su respuesta a mi correo por favor.
Orlando Galloso , Truujillo, Peru ( 01.12.13)
Hola, Orlando. La pregunta que planteas me parece muy interesante y como todas las cuestiones realmente interesantes no tiene una respuesta simple. Trataré de explicarte mi opinión sin extenderme demasiado. Pides que responda directamente a tu correo pero creo que la respuesta puede ser interesante para otras personas por eso he decidido responder en forma de comentario público. De todos modos si tienes alguna duda más y puedo ayudar no tengo problema en comunicarme directamente contigo.
De manera general en una dieta de tipo paleo/evolutiva se recomienda tomar verduras y frutas. Sin embargo, la mayoría de autores advierten contra el exceso de fruta. Yo personalmente considero que el peso de las verduras ha de ser mucho mayor que el de las frutas. La cantidad de fruta concreta que podemos tomar puede variar mucho de una persona a otra en función de: sus características individuales, determinadas por su genética, que influirán en su capacidad de asimilación de la fructosa y en general de los carbohidratos (la fruta no sólo contiene fructosa); del estado de salud, y de la cantidad y tipo de ejercicio físico que haga dicha persona. En general, ante la duda, con la fruta deberíamos tener una precaución que no es necesario tener con verduras y raíces.
En cuanto a la fructosa, es un tipo de azúcar con el que en principio deberíamos ser precavidos ya que no es el azúcar inocuo, natural y recomendable para diabéticos que nos han querido vender. Sin embargo no es lo mismo tomar la fructosa contenida en una fruta que usarla como edulcorante. Tampoco es recomendable la gran cantidad de fructosa concentrada que contienen alimentos como el jarabe de ágave. Lo que quiero decir es que para la mayoría de la gente tomar fruta de una manera moderada no suele ser fuente problemas.
Por otra parte la cantidad de fructosa contenida en las frutas puede variar mucho de un tipo de fruta a otra y también en función de la manera en que ésta se ha producido. Hace un tiempo leí que las variedades actuales de fruta contienen más fructosa que las ancestrales ya que se han seleccionado para que resulten más dulces (la fructosa tiene un gran poder edulcorante). No podemos hacer mucho contra esto pues aunque compremos fruta ecológica probablemente no se parezca mucho a la fruta silvestre que podían consumir nuestros ancestros. Sin embargo, sí que podemos elegir aquella fruta que de manera natural tiene menos fructosa como cítricos, kiwi, plátano, piña, papaya, arándanos o grosellas, y evitar o reducir fruta como la manzana, el melocotón, los higos o los dátiles.
Para finalizar te hablaré de mi experiencia personal con la fruta. Cuando comencé a hacer una dieta de tipo evolutivo aumenté considerablemente el consumo de verduras y frutas ya que éstas ocupaban en mi dieta el espacio que antes pertenecía a los cereales. Pronto noté que tomar tanta fruta no me sentaba bien y comencé a reducirla. Llegó un momento en que empecé a relacionar la ingestión de fruta con algunas molestias de salud como hinchazón abdominal y migrañas por eso la reduje todavía más hasta hacerla casi desaparecer salvo después de sesiones de ejercicio muy intensas, ya que tenía la sensación de que mi cuerpo la reclamaba. Era una situación extraña porque notaba que la fruta no me sentaba bien del todo pero a la vez sentía que necesitaba esos carbohidratos. Encontré una respuesta a esos problemas al descubrir que, por lo visto, mi cuerpo no tolera demasiado bien la fructosa, algo que parece que es más habitual de lo que yo pensaba. Eso genera problemas en mi intestino y repercute en mi salud general. Aprendí que la solución no estaba en dejar de tomar frutas si no en elegir adecuadamente el tipo de frutas. Llevo ya un par de meses consumiendo sólo frutas con una cantidad baja de fructosa y en general de FODMAPs (http://en.wikipedia.org/wiki/FODMAP). Eso me permite consumir fruta sin que dañe mi salud. ¿Cuanta fruta tomo? Depende sobre todo del ejercicio físico que haya hecho ese día, en ese sentido me fío de mi cuerpo. Si me levanto y desayuno sin haber hecho ejercicio no suelo desear tomar fruta, pero si he salido a correr antes de desayunar sí que la necesito y puedo tomar varias piezas sin problemas. En definitiva he descubierto que, para mí al menos, lo que funciona no es dejar de tomar fruta si no elegir el tipo de fruta que me sienta bien y esa es la que tiene menor cantidad de cierto tipo de carbohidratos de cadena corta (FODMAPs) entre los que se encuentra la fructosa. Esto es sólo mi experiencia pero creo que puede servir a otras personas.
Saludos.
Mi primer post en la web. La primera vez que te leo. Pero quiero darte un 10 por el artículo.
Muy interesante y muy elaborado, explicado de forma sencilla (hasta yo lo he entendido jajaja) pero muy completa. No te mentiré y se me ha hecho un poco largo (tal vez, 5 motivos en un post y 5 en otro para tener tiempo a asimilar conceptos me hubiera ido mejor, pero esto supongo que es muy subjetivo jaja) pero el interés y la pasión de tus palabras me han dado fuerza para finalizarlo. Incluso de leer los comentarios.
Darte las gracias, por el articulo. Seguiré leyéndote.
Saludos
Muchas gracias a ti por tus palabras, CrazyMountainBCN. Reconozco que algunos de mis post son un poco largos, quizás te haga caso y escriba alguno en dos partes. De todos modos no garantizo que las partes sean cortas 😉
Saludos.
Me ha gustado mucho el post.
Yo desde pequeño he tenido muchos problemas con el peso.
He hecho muchas dietas con las que perdía hasta 30 kilos pero siempre acababa recuperando el peso. En la última que hize (Pronokal) perdí 40 kilos y por miedo a volver a engordar empecé a ir al gimnasio a diario, allí conocí a mi actual nutricionista que me introdujo en la dieta paleolítica y estoy mejor que nunca. No solo no he recuperado peso sino que sigo adelgazando mientras disfruto comiendo y en grandes cantidades y me siento más sano y con más energía que nunca. Por primera vez llevo mas de dos años en un peso adecuado a mi estatura e incluso he hecho alguna media maratón (cosa impensable para mi hace pocos años).
Hola Marius. Tu testimonio viene a sumarse al de muchas otras personas, entre las que me cuento, que han visto como su salud y estado de forma han mejorado con una dieta de tipo evolutivo. Muchas gracias por tu aportación.
Saludos.
Me ha encantado y no solo eso, me has enganchado a todo lo que escribas… me viene genial este articulo y sus enlaces porque precisamente en estos dias comienzo a interesarme por la alimentación deportiva saludable y por supuesto la no deportiva. Así que muchas gracias Fina.
Voy a seguir leyendo enlaces… 😉
Hola Alvaro:
Encantada de que te haya gustado el texto. Yo pienso que a veces los corredores nos obsesionamos demasiado con los suplementos específicos para el rendimiento de cara a la competición y olvidamos la alimentación del día a día que, como el entreno constante, es lo que finalmente nos llevará a un mejor rendimiento y, por supuesto, a una mejor salud. En ese sentido creo que deberíamos intentar comer la mayor parte del tiempo comida «de verdad» que nutra nuestro cuerpo y evitar o reducir aquellos alimentos que sólo aportan calorías vacías y que encima nos causan o pueden acabar causándonos problemas de salud. En ese sentido la perspectiva de la nutrición evolutiva puede ayudarnos mucho.
Saludos.
Hola Pesque, una pregunta, dices que si hacemos una dieta para bajar peso enfocandola en consumir menos calorias nuestro cuerpo se vuelve mas eficiente y hace que consumamos menos energia y ,por lo tanto, no nos desharemos de los malditos michelines pero si que recomiendas hacer ayuno intermitente, con lo cual, en mi caso, hago 16/8, al pasar 16h sin comer, mi cuerpo no se vuelve mas eficiente al ver ese periodo tan prolongado de ayuno sin que le entre ni una sola caloria? Hace unos dos meses que sigo la dieta paleo y uno haciendo el AI de 16h….si que noto que algunas veces, sobretodo a media tarde, me dan bajones y me pongo un poco de mal humor, solo de vez en cuando….pero voy perdiendo peso…pero eesos michelines siguen ahi….gracias…buen trabajo.
Hola Pesque,resulta agradable leer tus articulos y te felicito por ello. Respecto al estilo de vida nutricional quería comentarte mi experiencia. desde hace año y medio sigo dieta vegana,sobre todo por los efectos inflamatorios que el consumo de carne tiene sobre el organismo, el impacto medioambiental que tiene la produccion industrial de los diversos tipos de carne(necesitamos 30 kg de cereales para producir un kg de carne),los agentes quimicos(antibioticos y demás)empleados en su producción, y la correlación entre el consumo de carne y cáncer, entre otras enfermedades.
respecto al resto de alimentos(frutas,verduras y frutos secos ecologicos) coincido contigo,además de coincidir en el concepto minimalista de carrera y de vida.
Mi intencion ultima con estos datos sobre la carne es que personas preocupadas por llevar una vida sana como tú,se informen sobre este aspecto y ellas mismas saquen sus propias conclusiones.
Te invito a leer el libro la enzima prodigiosa, del doctor Hiromi Sinya ,y los libros de la Dra. Odile sobre Nutricion y Cáncer.
Saludos y te deseo muchos kms de disfrute!!!