1.Mis dos pasiones – por Ñusi Martos

Este proyecto nace de mi tremenda ilusión por hacer aquello que tanto me gusta. Me encanta escribir. No importa para quién, no importa el motivo, siempre disfruto haciéndolo. Jamás pensé en la posibilidad de que alguien ajeno a mi familia o amigos me leyera. Pero en este momento de mi vida, siento que hay algo que puedo contar a los demás y que tal vez, a algunos pueda interesar.

De cualquier modo, compartiré mi historia, pues más o menos leída, me permitirá hacer un sueño realidad. Lo que en este rincón leeréis, es tan sólo un reflejo de lo que cualquier persona, hombre o mujer, es capaz de hacer. No me refiero a pisar la luna, cruzar el atlántico a nado o descubrir el mayor invento del siglo actual. No; me refiero a cosas a nuestro alcance, mucho más tangibles, aunque en medio de este vorágine de vida que llevamos, consideremos imposibles. Todos tenemos alguna afición que nos hace desconectar, que nos hace sentirnos vivos, y si no es así, la tenemos que buscar!

La vida es demasiado corta para dejar que pase entre trabajos, reuniones, niños, colegios y obligaciones. También ha de haber un hueco, por pequeño que sea, para nosotros. Para uno mismo. Para la soledad. En definitiva para todo aquello que te permita sentirte vivo y desconectar. Yo me siento así desde que comencé a CORRER . Y de repente me doy cuenta que puedo unificar mis dos pasiones en una y ESCRIBIR acerca de esto y de lo conseguido dos años después.

Nunca he sido una persona con demasiada iniciativa. Nunca he sido líder sino seguidora, y hasta ahora he llevado una vida normal que apenas ha salido de los cánones que marca la sociedad. Y mire usted por donde….ahora quiero arriesgar…Esta es mi historia!

…….La vida pasa a veces por delante nuestra sin apenas darnos cuenta. Como si fuera el último tren, ese que no nos dio tiempo a coger. Y entonces esperamos al siguiente, o aplazamos el viaje para llegar a ese destino que desde hace tiempo tenemos en mente. Ese lugar que deseamos conocer, ese objetivo que queremos lograr, esa relación que queremos comenzar, o ese te quiero que necesitamos gritar. Pero con el paso de los años, nos damos cuenta de que no podemos permitir que esto ocurra así. Todo pasa demasiado de prisa y cada vez somos más conscientes de ello. soy un cualquiera Sin embargo es una lección que nos cuesta trabajo aprender. Y creo que debiera ser la primera. La que aprender y asimilar desde niños. De la que más debiéramos tomar consciencia.

Y hasta el momento, mi vida ha pasado tal cual lo estoy describiendo. Rápido y fugaz. Aunque he de decir que en mi opinión eso también es buena señal. Sería egoísta si no reconociera que estoy teniendo una vida plena. Tuve una feliz infancia y niñez que no dejo ni un sólo día de agradecer. Unos padres y hermanos que llenan mi corazón de incontables y emotivos recuerdos. Una adolescencia divertida, alocada y rebelde donde comencé a forjar las amistades de siempre. Una juventud más tranquila, responsable, estudiando, ordenando ideas y consiguiendo mis primeros trabajos. Y una madurez que comparto con la persona que quiero, llena de responsabilidades y obligaciones pero con nuevas ilusiones. Con nuevos y buenísimos amigos que voy encontrando en mi camino y con más fuerzas que nunca para correr sin dejar que se me escape el tren.

Sí, yo ya estoy aprendiendo la lección. Nunca es tarde para hacer aquello que deseas. Todo es posible. De todo somos capaces. No importa la edad, no importa la condición, tan sólo las ganas que le eches y la ilusión. Y poco a poco, post a post, os iré contando mi experiencia con el running, mis comienzos, lo que para mí significa, la satisfacción que me reporta, mis logros y mis futuras metas. Tan sólo adelantaros que en menos de dos años desde que comencé a correr, no sin un poquito de ambición, conseguí ser finisher de mi primer maratón. 42,195 km repletos de sensaciones y colmados de sentimientos. ¿Cualquiera puede hacerlo? Pues claro, yo os lo cuento!

>

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *