El sábado 2 de febrero se celebró en Montilla (Córdoba) el I Encuentro Nacional de Corredores Descalzos y Minimalistas de España . Por fin se hizo realidad algo que nos rondaba la cabeza desde que estuvimos en septiembre del 2011 en la NYCBR y que gracias al empuje y buen hacer de Pepe Roldán se pudo finalmente realizar.
Lo que empezó con un simple correo electrónico y la propuesta de reunirnos unos pocos corredores para hablar sobre descalcismo y zapatillas minimalistas en la víspera del I Cross Batalla de Munda , poco a poco se fue convirtiendo en un evento barefoot en toda regla con actividades durante todo el día y una pequeña feria comercial para poder ver y comprar calzado de este tipo, productos naturales, planes de entrenamiento, etc. Nuestra idea era hacer algo en condiciones desde el principio, aunque estuviésemos 10 personas, y al final el salón de actos de Envidarte, el espectacular centro de arte contemporáneo del vino donde se celebró el encuentro, se quedó pequeño, con muchos asistentes que tuvieron que permanecer en pie o sentarse en el suelo porque nadie quería perderse nada. Hasta el alcalde de Montilla, Sr. Federico Cabello del Alba Hernández, se pasó por allí para inaugurar el encuentro.
Desde por la mañana tuvimos actividades, empezando por una charla de nutrición evolutiva a cargo de Fran Serrano (fisioterapeuta deportivo) que fue todo un éxito y continuando con los talleres teóricos y prácticos sobre minimalismo avanzado y de iniciación al minimalismo, a cargo de correrdescalzos.es y entrenamientonatural.es respectivamente. Sobre estas actividades ya irán apareciendo relatos y opiniones tanto aquí como en la web de la carrera Cross Batalla de Munda , ya que yo me los perdí y no puedo hablar de ellos salvo por lo que me han ido diciendo. Sólo se que todo el mundo se quedó bastante satisfecho con lo visto y oído.
Yo me lo perdí porque estaba corriendo. Como muchos sabéis, el pasado mes de diciembre me propuse acabar el maratón de Málaga en menos de 3 horas corriendo descalzo y no fue posible. Tuve que retirarme en el km 36 cuando iba en el tiempo previsto porque me salió una gran herida por corte o abrasión (aún no lo tengo claro) en el talón izquierdo y decidí parar antes de hacerme más daño. Fue una verdadera lástima pero quizás no había elegido bien el sitio para correr descalzo, ya que el asfalto durante gran parte del recorrido era bastante agresivo.
El caso es que al poco tiempo, y mientras hablaba de cuando volvería a intentarlo, dije medio en broma que tenía que buscarme un recorrido adecuado y hacer ahí yo el maratón por libre. El caso es que esta idea fue poco a poco cogiendo forma y el remate fue cuando Antonio Madriñán , autor de El mundo en tus pies , me propuso hacerlo en el marco del encuentro barefoot de Montilla. A partir de ahí, mi buen amigo y anfitrión en Montilla, Pepe Roldán, se puso manos a la obra de una manera incansable para dar con un recorrido adecuado para hacer el maratón, teniendo en cuenta no sólo el tipo de asfalto, también el tráfico, los cruces, la cercanía al lugar del encuentro, etc. Tras muchas pruebas y varios cambio de recorrido (el último a falta de dos días), finalmente me diseña un recorrido de 5,1 km de ida y otros 5,1 de vuelta, al que tendré que dar 4 vueltas y completar en el entorno de Envidarte los metros finales necesarios para completar los 42, 195 kilómetros de un maratón.
El recorrido y el terreno es totalmente desconocido para mi. Lo voy descubriendo mientras voy corriendo, pero confío plenamente en Pepe, corredor que como yo hace parte de su entrenamiento a pie corriendo descalzo. El recorrido está muy bien, he de reconocerlo. El asfalto por la mayor parte del mismo es una verdadera maravilla, suave y esponjoso. Sólo hay una zona mala, de la que estoy avisado, de unos 150 metros (al pasar por debajo de la carretera) y otra regular que es de 1 km o así, los de entrada y salida de la localidad. Además de esto, el recorrido no es llano. Tiene aproximadamente 2,5 km de subida (y de bajada) en cada vuelta. La bajada no me favorece, porque pilla en la zona de peor asfalto (no puedes dejarte caer sin más porque te destrozarías la piel) y además atraviesa 2 rotondas. Las rotondas tienen bastante suciedad (piedrecillas) y tráfico, por lo que no puedo desviarme de mi trazado buscando zonas limpias. Esto hace que al pasar por ellas tenga que frenarme si no quiero clavarme algún chino. Pero una vez que salía del pueblo y cogía la larga recta de unos 3 km, el asfalto era una maravilla.
El destino quiso que ese 2 de febrero fuese uno de los días más ventosos del año en toda España, y Montilla no se libró. En la recta pegaba bastante de cara, y a favor en la vuelta, aunque esto fue muy cambiante durante toda la mañana. En las dos primeras vueltas no me afectó mucho ni el viento ni la subida, pero en las dos últimas sí. Acabar un maratón subiendo desde el km 38,5 hasta el 41 y con viento fuerte en contra se hace duro, mucho más cuando vas con el tiempo justito y pretendes hacer uno determinado. Fue el único momento duro del recorrido. El último kilómetro y pico del recorrido fue algo inolvidable. Entrar en Montilla con tanta gente siguiéndome, la policía local escoltándome, los coches parados en las rotondas para dejarme pasar…, se me ponen los pelos de punta de recordarlo. Literalmente me sentí flotar, corriendo por debajo de los 4 minutos ese último km.
Tengo que agradecerle a mucha gente el que esto haya sido posible, ellos saben quienes son. Sí quiero agradecer desde aquí su apoyo y ayuda a los cuatro corredores de Montilla que me acompañaron, me guiaron, me protegieron del viento, me marcaron el ritmo y hasta me llevaron el bote de agua. Dani Delgado, Alejandro Carrasco, Antonio Gómez y Luis Rodríguez. No tengo palabras para agradecerle a cada uno los 10 km que hicieron conmigo. Es increíble ver la ilusión que pusieron y las ganas de agradarme y ayudarme que pusieron los 4 sin conocerme de nada. Se tomaron mi reto como suyo y me llevaron en volandas. UN MILLÓN DE GRACIAS. También agradecer a Pachi, que me siguió en bici grabándome y animándome todo el recorrido (el es que graba el vídeo que hay al final) y al chaval que iba en moto (no recuerdo su nombre) adelantándome en los cruces y rotondas para parar el tráfico cuando pasaba yo. Realmente increíble lo que allí viví. Y de remate mi llegada a meta, con toda mi familia, amigos y conocidos allí esperándome junto a unas 150 personas, muchas de ellas haciéndome fotos a los pies sin salir de su asombro y preguntándome si podían hacerse una foto conmigo. ALUCINANTE.
No quiero enrollarme mucho más contando cada km y mis sensaciones. Una imagen vale más que mil palabras y prefiero que veáis las fotos, el vídeo del final y otros que están en camino. Sólo añadir que acabé muy contento y en muy buen estado. Paré mi reloj en 2h59m16 y 42, 210 km. No es un recorrido con medición oficial por un juez y quizás mi GPS mida algo más o algo menos, pero realmente me es indiferente terminar minuto arriba o abajo. Obviamente a cualquier corredor nos gusta romper las míticas barreras de tiempo en media maratón y maratón, pero en esta ocasión, más que el tiempo final me importaba el cómo terminar. Si hubiese terminado en 2h50 o 55 pero con los pies doloridos o heridos, no hubiera estado satisfecho. Mis pies terminaron sin un sólo roce o rasguño y hubiera podido seguir corriendo.
Tras un tapeo con vino de Montilla y jamón espectacular para todos, nos fuimos a comer y rápidamente volvimos a Envidarte para escuchar las charlas previstas. Empezamos con la de Pablo Fernández de SportLab y continuamos con la de Ben Le Vesconte de Vivobarefoot. , ambas con muchísimo público y mucha participación del público asistente.
Pablo Fernández nos iba a hablar de biomecánica de carrera pero pensó que quizá estábamos saturados de eso por los talleres de la mañana y empezó a hablarnos de fisiología y rendimiento deportivo. Realmente era interesante, pero allí queríamos hablar de una cosa y en poco tiempo lo «reconducimos» entre todos y estuvo más de una hora hablando y contestando preguntas sobre biomecánica, amortiguación, zapatillas, etc. Fue muy ameno, divertido e interesante. Gracias Pablo por tu participación.
Después de Pablo le tocó el turno a Ben. Ben Le Vesconte es el director comercial de Vivobarefoot y responsable del Trainning Clinic de formación de coach que hace la marca en Londres . Desde el primer momento que le dijimos lo que íbamos a hacer nos dijo que nos apoyaba y que el mismo vendría a hacer una presentación, algo que no hubiésemos imaginado y que le agradecemos muchísimo. Realmente este encuentro cogió fuerza cuando el nos confirmó su presencia y el apooyo de la marca.
Su charla era muy esperada y no defraudó a nadie. Empezó poniendo a toda la sala en pie y haciéndonos saltar a todos sobre nuestro sitio. fue un momento muy divertido con el que se ganó a todo el auditorio. Continuó explicando las tres maneras naturales de moverse del ser humano, andar, correr y esprintar , y como hace 40 años se introdujo una nueva manera de moverse, el jogging , mediante la cual se impacta con el talón y se altera totalmente toda la biomecánica natural del ser humano para correr. Nos mostró los gráficos con las fuerzas de impacto con una y otra manera de correr y nos mostró un interesantísimo estudio sobre los pies, sobre como los deforma el calzado y sobre los beneficios de ir descalzo realizado en 1905, para que digan que esto del barefoot es una moda reciente. Tras la charla estuvimos haciéndole preguntas que el respondió pacientemente y con mucho sentido del humor hasta que el moderador dijo basta, ya que la gente estaba ansiosa por preguntar cosas.
Tras esto se pasó a la mesa redonda de corredores descalzos y minimalistas con una cierta experiencia, en la que tuve el gusto de participar junto con Nano Piesnegros , Antonio A. carrillo y Miquel Ivars . Tras una breve presentación inicial de cada uno y un pequeño vídeo de la GR10-Xtreme Valencia grabado por Miquel corriendo con VFF, pasamos a un turno de preguntas y consultas por parte de los asistentes muy entretenido.
Llegué al hotel casi a las 9, me duché y nos fuimos toda la familia a la cena con todos los participantes. Al día siguiente tenía las piernas algo tocadas pero poco. Los pies con algo de sensibilidad en la zona del talón donde me hice la herida en Málaga porque es una piel nueva, menos curtida. No corrí el cross por quedarme con mis niños y mi mujer haciendo fotos y animando a los demás. A las 4 me monté en el coche y estuve conduciendo casi 4 horas hasta Almería, y el lunes tenía las piernas y los pies como si no hubiera corrido. Ni una sola señal de agujetas, carga, tensión, etc. Es lo que más me sigue asombrando de correr descalzo. Es realmente sorprendente comprobar cómo las piernas y los pies realmente sufren mucho menos desgaste que cuando corría con zapatillas amortiguadas.
El Encuentro resultó un éxito absoluto. Todo el mundo pudo escuchar opiniones de expertos, aprender con ellos, resolver dudas, consultarles, correr, ver calzado minimalista y sobre todo, conocer a otros corredores y ponerle cara a amigos virtuales de toda España.
Todo el mundo pudo comprobar que se puede correr un maratón sin necesidad de amortiguación artificial. No hace falta ser keniata ni tarahumara. Todos llevamos de serie un complejo y eficiente sistema amortiguador que aprovecha la energía elástica de nuestros tendones para impulsarse y absorber el impacto y unos pies que informan con detalle al cerebro para así regular la fuerza con la que pisas. No necesitamos nada más.
El II Encuentro Nacional de Corredores Descalzos y Minimalistas ya está en marcha. En muy pocos días anunciaremos la fecha y el lugar. Os esperamos allí a todos.